'Plantfulness': una práctica que ayuda a calmar el estrés

Una de las cosas que trajo el confinamiento fue un 'boom' por las plantas a todos los niveles, pero principalmente, por las de interior. Muchas personas que nunca habían tenido una empezaron a llenar sus salones, cocinas o baños con algún ejemplar y poco a poco, esta pasión por la botánica ha ido calando. Tanto es así, que ha habido momentos en los que los viveros no han dado abasto para satisfacer la demanda de ejemplares.

El hecho de pasar más tiempo en los hogares ha hecho que en muchas personas se despertara una nueva afición por la jardinería. Sin embargo, la «semilla plantada» en ese momento, ha ido creciendo gracias a los muchos beneficios que esta práctica puede aportar. De hecho, hay una nueva tendencia que va ganando adeptos y a la que ya se conoce como 'plantfulness'.

El nombre ha empezado a sonar más fuertemente gracias a Eva Durán, escritora del libro 'Plantas para ser feliz' y fundadora de la escuela Plantlovers.

El 'plantfulness' es el hecho de cuidar las plantas de tu hogar dedicándoles atención plena. Es decir, ese ratito diario para regarlas, echarles abono, ver si les está dando el sol correctamente o si es necesario podar alguna hoja, pero hacerlo con los 5 sentidos puestos en ello, al igual que si estuviéramos practicando 'mindfulness'. Aporta un momento de calma muy necesario para combatir el estrés diario en el que vivimos inmersos.

Para ello, lo ideal es no tener demasiadas plantas, al menos, al empezar, ya que se puede producir el efecto contrario y que la persona se agobie por no poder atenderlas todas o porque una se está marchitando. Es mejor empezar por dos o tres plantas y, cuando vayan creciendo, se pueden ir plantando más por esquejes o adquirir alguna nueva. Ver cómo se va reproduciendo una 'hija' de la planta que se lleva cuidando semanas, es una gratificación extra al bienestar que provoca el cuidarlas.

A los beneficios que aporta el simple hecho de tener plantas en casa como que limpian el ambiente o regulan la humedad, hay que sumar los que ofrece el 'plantfulness'.

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Para disfrutar de los beneficios del 'plantfulness' se pueden observar simplemente las plantas desconectando de las preocupaciones y dejando que la vista descanse o, tomar un contacto más directo plantando alguna semilla. En este caso, a todos los beneficios anteriores habría que sumar el orgullo que se siente al ver nacer una nueva vida gracias a nosotros.

Las personas que todavía no se han visto atrapadas por el 'boom' de poner una planta en su vida y se planteen empezar a disfrutar de los beneficios del plantfulness, lo ideal, es que empiecen por plantas fáciles de cuidar.