El nuevo Sporting de 'MAR' aprieta los dientes

Fue una de las debilidades del Sporting de Miguel Ángel Ramírez el curso pasado, abierto en canal en defensa: lamentó 23 goles en 19 partidos, concedía demasiadas situaciones de remate, no fue capaz de encadenar más de 180 minutos sin goles en contra en toda la segunda vuelta y solo dejó su portería a cero en seis ocasiones. Zarandeado por la categoría en sus primeros meses, el entrenador canario lleva obsesionado desde el comienzo del verano con invertir esa tendencia, buscando un equipo menos vulnerable. Y tras un aterrizaje forzoso en Pucela, lo ha ido consiguiendo.

El termómetro de los disparos a puerta recibidos por el equipo en el último mes es sintomático. Desde la visita del Mirandés a Gijón (11 tiros a Yáñez), la cifra de disparos entre los tres palos ha ido cayendo de forma progresiva: Racing de Ferrol (3), Burgos (1) y Oviedo (0), donde el equipo firmó su segunda portería a cero de la temporada. Estadísticamente, el guardameta del Sporting figura como el tercero con más paradas de Segunda. Pero ese tajo, aunque ha aumentado para los centrales y el portero en otros frentes como los centros al área o las acciones de estrategia, se ha reducido en lo que Yáñez denomina «situaciones directas».

Hay algunas claves para profundizar en esa solidez. La sociedad Róber Pier y Pablo Insua, unidos al propio Rubén Yáñez, de brazos muy firmes en el juego aéreo, está dando una solvencia importante en la zona interior. Sobre todo para retener o rebotar esos envíos laterales o los propios saques de esquina. Pascanu todavía está engrasando, exigido en algunos partidos por su cometido, e Izquierdoz está llamando a la puerta, como se vio en el tramo final del partido contra el Oviedo. «Hicimos treinta centros, pero nos cuesta que alguno sea peligroso», se lamentó Álvaro Cervera después del derbi regional. Ninguno dio para ocasión clara.

En ese partido, Ramírez cerró con tres centrales, convirtiendo al Sporting en un frontón para el Oviedo, sin remate ni finalización. Esto y la cercanía entre líneas en fase defensiva obligaron al grupo de Álvaro Cervera a recurrir una y otra vez a los centros al área, con inferioridad en el remate, y a las acciones de estrategia. Ahora, si Ramírez da o no carrete a esta formación es una de las incógnitas de la semana, sobre todo con la vuelta de Djuka, la apuesta por Juan Otero en ataque y la dificultad para encajar en el once a Fran Villalba, Gaspar y Hassan. Pero en los dos partidos en El Molinón alineó un 4-4-2, con Pascanu como falso lateral derecho, aunque Guille Rosas se cargó de méritos en el derbi, despachando un partido notable. La tendencia del técnico apunta más al segundo dibujo.

También parece aumentar la agresividad y el oficio del equipo. Solo cinco equipos han cometido más faltas que el Sporting, 71, lo que supone una media de 14,2 por partido. El año pasado finalizó con 531 en 42 jornadas: 12,6. Este aumento, al menos por el momento, no se refleja en amarillas. El equipo se sitúa en la parte media de este apartado, con solo trece cartulinas (ninguna roja). Nacho Méndez, un mediocentro, y Juan Otero, un delantero, son los que más faltas hacen. «Somos un equipo joven que ha madurado. Competimos mejor y cuidamos los detalles», defiende el luanquín.

Dos equipos en racha

Curiosamente, el Tenerife se presenta en la estadística como el proyecto más duro de pelar y físico de toda Segunda División. Es el líder indiscutible de faltas cometidas, con 91, y el de las tarjetas amarillas: 18, Es pegajoso en la presión, con buenos números en la recuperación, ganador de duelos y tiene al delantero Enric Gallego como el punto inicial de esa guerra de desgaste.

El momento del Sporting como local confronta con el músculo del Tenerife a domicilio. En los dos partidos que el equipo de Ramírez ejerció como anfitrión este año, cantó victoria: Sporting-Mirandés (3-0) y Sporting-Burgos (2-1). Contra la tradición de los equipos canarios, los jugadores de Asier Garitano, por su parte, salieron vencedores de los dos desplazamientos que han realizado hasta la fecha y, en su caso, con su portería sin tacha: Huesca (0-2) y Andorra (0-1). Se anuncia choque de trenes.