Cae una banda organizada que cometió siete robos con fuerza en el HUCA

Actuaron en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), por donde se movían a sus anchas gracias a una llave maestra que les permitía acceder a estancias reservadas para el personal. Y también sustrajeron correspondencia con documentación en buzones de localidades del centro de la región que utilizaban para llevar a cabo estafas y suplantaciones de identidad. Los tres presuntos autores de estos hechos, de nacionalidad española y vecinos de Oviedo, integraban una banda organizada dedicada a los robos con violencia que la Guardia Civil da por desarticulada una vez concluida la operación 'Falaz'. El cabecilla, que contaba con numerosos antecedentes, ya está en prisión por orden del titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Oviedo.

Se les imputan siete delitos de robo con fuerza en el HUCA, el asalto a una vivienda de Oviedo, cinco robos con fuerza en buzones de viviendas de Oviedo, Gijón y La Fresneda, varios delitos de estafa, tres de usurpación de funciones públicas -les fue incautada una tarjeta falsificada de la Guardia Civil, varios uniformes de la Policía Local de Oviedo y una acreditación de un médico del HUCA- y varios delitos de usurpación de estado civil, al haber suplantado la identidad de diferentes personas cuando realizaban trámites administrativos.

Del Hospital Central llegaron a sustraer tres videoproyectores, un fonendoscopio, una bata de médico, un ordenador portátil y un desfibrilador. Fue precisamente el día que robaron este aparato, el pasado 9 de noviembre, cuando los agentes, que llevaban un tiempo vigilándolos, procedieron a la detención de dos de los integrantes de la banda cuando éstos abandonaban el centro hospitalario. El tercero fue arrestado al día siguiente.

77 cupones de la ONCE

También se les acusa de haber sustraído las llaves del domicilio de un invidente para acceder a su vivienda, en Oviedo, y robar 77 cupones de la ONCE, así como documentación en la que figuraban los números de cuentas bancarias.

Asimismo, según explicó ayer la Guardia Civil, con la documentación y la información que obtenían de robar la correspondencia en buzones de Oviedo, Gijón y La Fresneda realizaban contratos de telefonía móvil y obtenían terminales telefónicos que luego vendían en el mercado negro.