Principado y oposición urgen a Fomento a acelerar las obras para el Corredor Atlántico

El próximo día 6 la Comisión Europea lo hará oficial: modernizar la línea ferroviaria Venta de Baños-León-Gijón para el tráfico de mercancías y la alta velocidad, pasa a ser un objetivo prioritario. Es su propuesta que luego deben validar el Europarlamento y el Consejo de Europa. Desde 2013 la política de infraestructuras de la UE concentra la mayoría de las subvenciones en culminar nueve corredores transnacionales. Asturias había quedado descolgado y para corregirlo, Bruselas propondrá que el citado tramo se incorpore como parte del Corredor Atlántico.

La medida permite que todos los proyectos para mejorar la línea puedan concurrir al principal fondo de financiación de la UE, el programa Conectar Europa. Es decir, las obras de la variante de Pajares, la instalación del moderno sistema ERTMS en toda la línea, la adaptación de Lena-Gijón a la alta velocidad, o incluso la opción de ejecutar una estación intermodal en la ZALIA son ambiciones que ahora tienen mejores opciones para acceder a las ayudas comunitarias.

Principado, oposición y patronal coinciden en que supone «un éxito», pero advierten de que puede resultar insuficiente. Bruselas irá agotando los euros de Conectar Europa en convocatorias anuales a las que cada país concurre con sus mejores proyectos. Los que pueden convertirse en obras en menos tiempo y están avalados por informes sobre su rentabilidad económica terminan imponiéndose.

«El verdadero reto empieza ahora», advierte Alberto González, director general de la patronal Fade. Recuerda que los empresarios del noroeste se coordinaron para convencer a Bruselas de que ampliara el corredor; «a la chita callando, sin presupuesto pero con sentido común y machaconería en los despachos, hemos conseguido mucho». Ahora, insiste, toca «avanzar en proyectos concretos; vamos a competir con proyectos europeos que optan a los mismos fondos y tendremos que ser capaces de convencer de que los nuestros son mejores». González entiende que es un desafío «que requiere del empuje de todos, no solo de los empresarios».

De paso la incorporación al Corredor Atlántico «evita cualquier discusión sobre si mercancías o pasajeros, alta velocidad o mediopensionista; hablamos de un corredor de la red ferroviaria europea para mercancías y pasajeros, en alta velocidad y ya no hay más objetivos y discusión que determinar qué ritmos lleva la apertura de la variante de Pajares», considera el consejero de Infraestructuras, Fernando Lastra. El representante del Principado subraya que estar dentro del eje prioritario «garantiza por lo menos la financiación; de otra manera tendríamos muchas dificultades con los recursos propios».

«Es una buena noticia, y espero que se aproveche, que con ese 'OK' de la Comisión seamos audaces para tramitar esa gran cantidad de ayudas que se pueden derivar», confía el diputado del PP Luis Venta. El popular está convencido de que las inversiones «van a ser muy importantes para la economía asturiana gracias al trabajo del ministro de Fomento».

Salir de «la situación de fondo de saco en la que nos encontramos» era un objetivo de todo el noroeste, recuerda desde Podemos Héctor Piernavieja. El diputado confía que «ahora solo falta poner en funcionamiento de forma estable la autopista del mar»; eso y una gestión «impoluta» de las obras para que no deriven «en hechos intolerables como la Gurtel».

«Aquí no podemos quedar tranquilo hasta que veamos los trenes de pasajeros y mercancías circular por la variante», aprecia Ovidio Zapico. El diputado de IU entiende que «quedarse fuera de los corredores era estar para siempre en la periferia de Europa, pero esto abre una puerta bidireccional para que El Musel reciba y saque también mercancías». Con todo, Zapico reclama «invertir bien» los dineros a los que ahora se tiene acceso.

«Hay 50.000 millones en juego y se irán a los proyectos más sólidos, por eso es importante que Asturias tenga planificación, que ésta llegue al ministerio y la presente», aconseja el portavoz de Ciudadanos, Nicanor García. «Estaremos vigilantes para no quedar fuera de esa bolsa de millones», agrega.