El centro comercial del Nalón cumple veinte años con las obras para cerrar la zona de ocio en marcha

Son varios los empresarios que en los últimos meses han tenido que cerrar sus locales. De hecho, las obras de remodelación están en marcha. Obras criticadas por quienes acudían a este centro comercial. Esos trabajos se centran en la zona de cajas del espacio de alimentación y en el aparcamiento subterráneo, en previsión de cierre del otro espacio.

Según explicaron los dueños de negocios afectados, esas obras tienen como finalidad habilitar una zona de aseos ya que la existente hasta la actualidad está ubicada en el área de ocio que podría clausurarse de forma definitiva a finales del mes de diciembre.

En la misma sólo se mantiene abierto un gimnasio en la primera planta, que desde el primer momento se ha resistido al cierre justificando que se trata de un local que aporta beneficios, como otros muchos que finalmente tuvieron que cerrar. Otros empresarios han podido ubicarse en locales sin usos frente a la zona de cajas del supermercado.

Un cierre que tampoco está dispuesto a asumir el Ayuntamiento de San Martín del Rey Aurelio, cuyo equipo de gobierno, encabezado por su regidor José Ramón Martín Ardines, lleva semanas reuniéndose tanto con el propietario del gimnasio como con los gerentes del centro comercial para tratar de alcanzar una solución que evite el cierre de esta zona de ocio. Hasta el momento no se ha comunicado la posibilidad de un acuerdo, quedan aún 62 días para lograrlo.

Mientras se mantiene la esperanza, varios empresarios que estaban afincados en este centro comercial han trasladado sus negocios fuera del mismo, en la propia localidad de El Entrego. Otros han tenido que cerrar sus negocios sin una expectativa clara de negocio, lo que ha propiciado una pérdida de más de veinte empleos.

Este espacio comercial iniciaba su actividad en 2003 tras una inversión de 55 millones de euros y la promesa, decían los entonces gestores del centro comercial, una filial española del grupo Auchan, de crear 700 puestos de trabajo directos y al menos un millar indirectos. Previsiones que veinte años después no tienen nada que ver con el presente.