Fade advierte al Principado: «La UE va a reactivar las normas fiscales y los fondos extraordinarios se van a acabar»

La presidenta de la Federación Asturiana de Empresarios, María Calvo, recordó al Gobierno regional que el de 2024 será el último de los presupuestos marcados por «la senda de excepcionalidad que supuso la pandemia de covid. Estamos cerca del fin de la excepcionalidad». Y lo dijo porque el próximo año «la Unión Europea va a reactivar las normas fiscales, y los fondos extraordinarios se van a acabar», por lo que por una parte el tiempo se acaba para ejecutar obras y proyectos con cargo o apoyo en la financiación extraordinaria de la Unión Europea.

En todo caso, Calvo admitió que «es evidente que su principal característica es el crecimiento. Un crecimiento intenso y acumulado en los últimos años: desde los 4.524 millones del 2019 hasta los presentes 6.348 actuales median 5 años y un 40,3% de crecimiento», si bien a eso contrapuso que «la realidad económica, social y demográfica de Asturias no ha cambiado un 40,3%. Tenemos algo más de PIB - ha crecido un 1,38%- y hemos perdido más de 13.000 habitantes» Dicho de otra forma y ya con cierto nivel de crítica, la presidenta de Fade subrayó que «salvo la inflación, que ha crecido un 16 % desde 2019, no encontramos ningún dato consistente, ninguna base de economía real, que nos permita intuir que este incremento presupuestario va a sostenerse en el tiempo».

Admitió que persiste «el incremento de los ingresos impositivos», pero solo para matizar a continuación que «hay un hecho cierto e irrefutable, y es que el elemento fundamental de variación respecto del año anterior es el nuevo incremento ha vuelto a subir la recaudación por impuestos. En concreto, los impuestos directos e indirectos se incrementaron un 12%, 370 millones de euros. El 97% del crecimiento del presupuesto (380,4 millones) se debe a la mejoría de estos impuestos», afirmó.

Y añadió que «en cuanto al destino, el 92,4% del crecimiento del presupuesto se destina a incrementar el gasto corriente, que crece 351,4 millones.

Y si lo comparamos en el tiempo, el crecimiento de los impuestos directos e indirectos en Asturias ha sido del 28% desde el presupuesto del año 2019, con especial mención de los impuestos directos (+ 50 %)«. Todo ello, insistiendo en que la ejecución de las inversiones del Principado deja mucho que desear.

Pero es que la cuestión de la ejecución presupuestaria fue más allá en las críticas de patronal y cámaras. Así, por ejemplo, Pedro López Ferrer, en representación de la Cámara de Comercio de Gijón, puso de relieve, sí, que el de 2024 será «el presupuesto de mayor cuantía» de la historia del Principado, solo para apuntar justo a continuación que «lo es por la transferencia de fondos temporales» de la UE, al igual que María Calvo, y por subrayar que «lo que nos preocupe es su nivel de ejecución, que año tras año deja mucho que desear», al punto de que «para cumplir con los proyectos del Principado, en Gijón el ritmo de ejecución deberá ser muy elevado», mientras que el peso de la burocracia «se mide en retrasos de meses».

María Calvo, respecto a la excepcionalidad de los fondos europeos que se acabarán en próximos ejercicios, lanzó un aviso: «ahora hay recursos, por la excepcionalidad, pero todo indica que va a dejar de ser así, y si los dejamos de tener, o aligeramos la Administración, o cortamos la inversión. Y creo que a la Administración se le puede exigir más sin que implique más gasto», indicó, en una nueva llamada a la racionalización del sector público asturiano.

En general, la intervención de Ferrer respecto a la burocracia y la ejecución presupuestaria puede resumirse en una frase que pronunció en respuesta a preguntas de IU: «Más que la inversión que incluya el Principado en los Presupuestos, lo importante es que se cumpla y se ejecute. Esa es la clave».

En este último sentido, Ferrer pidió aligerar las tramitaciones administrativas y «cuidar los procesos de adjudicación, velando -no tanto por los precios de adjudicación, ya que muchas veces el criterio principal favorece a quien presenta bajas cercanas a lo temerario- por la calidad de las obras y favoreciendo el acceso de las empresas asturianas, porque hay mecanismos para ello, y otras comunidades autónomas los utilizan».

A la perversión que supone el exceso de burocratización (perversión en el sentido de que la burocracia está ahí para velar por la limpieza del procedimiento de adjudicación, pero que a veces lo que consigue, cuando se prolonga demasiado, es el simple desestimiento de quien pretende emprender) achacó Ferrer parte de la falta de actiividad de emprendimiento en Asturias, donde «a veces las ayudas de la Administración no llegan en años. Nótese que digo 'años' y no 'meses', y puedo poner ejemplos»

Y cerró su intervención inicial el representante de la Cámara de Comercio de Gijón con una reclamación que hicieron suya todos los representantes del empresariado: «hace falta más inversión y una clara determinación en la ZALIA, que debe ser el acelerador de las opciones de futuro de nuestras empresas», como gran polo logístico no ya solo de Asturias, sino de todo el noroeste español.

Porque ese fue el gran punto de las comparecencias de esta mañana. Mientras Gobierno central y asturiano se felicitan por la apertura de la variante de Pajares, de la puesta en marcha de la infraestructura, los empresarios llevan semanas insistiendo en que su apertura no es el final de nada, que hacen falta trenes de alta velocidad que aún no circulan por la variante, un incremento de las frecuencias y, sobre todo, que la variante sea una parte de un todo logístico que incluya la recuperación de la Autopista del Mar, el avance en el Corredor del Arco Atlántico e, incluso, como anotó por parte de la Cámara de Comercio de Avilés Daniel González, la conexión ferroviaria con el Aeropuerto de Asturias.

Fue precisamente el presidente de la Cámara avilesina quien inició su intervención reclamando -en perfecta sintonía con las otras dos cámaras y con la patronal- «que se diseñe un Plan Estratégico de Transportes, porque en las relaciones con el exterior está el futuro de nuestras empresas, y Asturias está en disposición de ser el polo logístico del Noroeste de España». Habló González de mejorar las cercanías, de conectar por tren el Aeropuerto y, mucho, de potenciar a este, en particular en cuanto a aviones «de carga media que puedan operar en este aeropuerto, como los Boeing 373 que utiliza Prime Air. Hoy el Aeropuerto tiene mucho más potencial de crecimiento del que se puede creer», dijo, y puso algunos ejemplos, como que gracias al incremento de conexiones rozará los dos millones de pasajeros anuales, que tiene potencial para crecer en carga y, por ejemplo, que un leonés «cuyo aeropuerto apenas tiene conexiones tendría ahora el aeropuerto de Asturias -si se le conecta por tren- a aproximadamente una hora».

Al igual que Ferrer, González insistió en la urgencia de que la ZALIA cuente con todas sus conexiones, y José Manuel Ferreira, por la Cámara de Oviedo, hizo una afilada crítica: «el caso de la ZALIA es el de esos déficits sistemáticos en Asturias. Hacemos las grandes inversiones y luego procastinamos durante años las inversiones pequeñas, como las que la ZALIA necesita para convertirse pronto en el gran polo logístico del Noroeste».