Así es el nuevo Bachillerato y la selectividad

. El Consejo de Ministros aprobó ayer el decreto que fija las enseñanzas mínimas en todo el país (saberes básicos y horas lectivas) del nuevo Bachillerato de la Lomloe, que comenzará a aplicarse en septiembre en el primer curso y un año después en el segundo. Es el currículo estatal que completa la aplicación de la reforma educativa en todas las etapas docentes, después de que semanas antes aprobase los de Infantil, Primaria y ESO. El currículo de Bachillerato se completará con los saberes y competencias que decidan las autonomías y los centros, que deben fijar el 40% restante del horario lectivo (el 50% si hay lengua cooficial).

Recupera Historia de la Filosofía como materia obligatoria, permite presentarse a la selectividad con un suspenso de forma excepcional, la etapa podrá realizarse en tres cursos en casos justificados, estrena una cuarta modalidad y varias asignaturas, y pide a autonomías y centros que den protagonismo a las tutorías y servicios de orientación psicológica y profesional, para ayudar a los estudiantes en la elección de modalidad y materias.

Para obtener el título de Bachillerato se debe aprobar todo, pero también se logrará con un suspenso si el estudiante cumple cuatro condiciones. Que sus profesores concluyan que ha alcanzado los objetivos y competencias de la etapa, no tener inasistencias injustificadas a la materia, presentarse a todas las pruebas (incluida la recuperación) y que su nota media, contando el suspenso, sea de 5 o superior.

De primero a segundo curso solo se podrá pasar con un máximo de dos suspensos. En caso de terminar el segundo curso con más de un insuficiente, el alumno podrá elegir entre matricularse solo de esas materias para obtener el título o repetir segundo curso completo.

En esta etapa, a diferencia de la nueva ESO, se mantiene la convocatoria extraordinaria para quien suspenda en la evaluación final, las conocidas como pruebas de recuperación, que según cada autonomía se realizan bien en junio bien en septiembre.

Habrá un Bachillerato de tres años, que repartirá las asignaturas de los dos cursos entre uno más. Sus beneficiarios están tasados. Está permitido para alumnos con alguna necesidad específica de apoyo educativo (discapacitados), para jóvenes que cursen en paralelo enseñanzas profesionales de música, para deportistas de alto nivel y para alumnos que lo justifiquen.

Se podrá estudiar a través de cuatro modalidades, cada una con su propio itinerario de materias, orientadas a la rama universitaria a la que se aspire. Son las existentes de Humanidades y Ciencias Sociales, de Ciencias y Tecnología y de Artes -que se divide en Música y Artes Escénicas y Artes Plásticas, Imagen y Diseño-, y la General, de nueva creación.

Cada alumno tiene siete asignaturas por curso, cuatro comunes a todos y tres específicas -entre las que habrá obligadas y de elección-, más las optativas que fijen autonomías o centros. Entre las comunes destacan Lengua Castellana y Literatura e Idioma Extranjero, de las que se darán tres horas semanales por curso, y el área filosófica, con dos horas semanales, con Filosofía, en primero, e Historia de la Filosofía, en segundo. El listado autonómico deberá incluir específicas de las que se cursan en otras modalidades y un segundo idioma.

La nueva modalidad incorpora saberes de humanidades, ciencias y arte y está pensada para quienes se orientan a carreras mestizas como Turismo, Psicología, Sociología o Periodismo. Además de las cuatro materias comunes, en el primer curso estudiarán Matemáticas Generales y en segundo Ciencias Generales, ambas de nueva creación. Las dos asignaturas específicas se elegirán de entre cualquiera de las materias de otras modalidades o de las dos de nueva creación: Movimientos Culturales y Artísticos (en primero) y Economía, Emprendimiento y Actividad Empresarial (en segundo).

Las 42 materias del real decreto contienen otras tres asignaturas nuevas además de las dos ya citadas. Literatura Dramática, de elección en Música y Artes Escénicas, Dibujo Técnico aplicado a las Artes Plásticas y el Diseño, posible en esa modalidad, y Coro y Técnica Vocal, en la rama de Música y Artes Escénicas.

La asignatura de Religión solo la estudiará quien lo desee, no contará para la nota media de selectividad y se impartirá una hora o dos a la semana, según se dé en un solo curso o en los dos.

La EBAU de este curso y la del próximo serán como las de los dos últimos años, los de la pandemia. Una selectividad flexible y más sencilla, porque permite al alumno elegir las preguntas que mejor se sabe. Pero, en 2024, según establece la Lomloe, habrá una prueba de acceso a la universidad de nuevo cuño, en cuyo diseño ya trabajan grupos del ministerio de Educación, el de Universidades y de los rectores.

La asignatura Historia de España de segundo curso iniciará los contenidos en 1812, con la expulsión de los invasores franceses y la aprobación de la primera constitución, 'La Pepa'. Este importante acotamiento de la materia ha causado polémica. El ministerio defiende que no es la única historia española que los alumnos estudiarán desde Primaria y que es el enfoque de historia contemporánea que tienen la mayoría de países en esta etapa.