Pastoreo y biodiversidad para conocer Onís
Sostenibilidad turística. El concejo pone en marcha este verano una ruta piloto que se adentra en la cultura y el paisaje a través de grupos reducidos y con guía local
GLORIA POMARADA
Miércoles, 5 de julio 2023, 01:07
Pastoreo y biodiversidad son los elementos que dan sustento a la nueva ruta turística de Onís, un itinerario impulsado dentro del plan de sostenibilidad y ... que busca adentrar al visitante en el conocimiento del paisaje y la cultura local, lejos de las masificaciones. Con seis personas por grupo, acompañados en todo momento por el guía oniense Félix López Traviesa, los recorridos vivirán este verano una primera fase piloto iniciada ayer mismo. «Esta ruta es para entender lo que hay, interpretar el paisaje, cómo se vive aquí, de dónde venimos y hacia donde queremos ir», explica Javier Gil, biólogo de la Fundación de la Conservación del Quebrantahuesos (FCQ), entidad que desarrolla el plan de sostenibilidad turística junto al Ayuntamiento. Con el Centro de Visitantes Montañas del Quebrantahuesos como punto de inicio, son dos los itinerarios diseñados: uno con cuatro paradas y otro que añade a la visita la cueva de maduración de Quiliama. El recorrido, a bordo de un vehículo 4x4, se detiene en primer lugar en el área recreativa de Llanu Miyar, un «punto estratégico» para explicar las tres partes en las que se divide el concejo: el valle, el puerto bajo y el alto. El bajo, por donde se desarrolla buena parte de la ruta, «es fundamental para la supervivencia de la ganadería extensiva en invierno», apunta Gil. La ganadería, el pastoreo y la elaboración de queso Gamonéu son eje trasversal de toda la visita, con la que se evidencian las «relaciones del ser humano con la tierra». Explican, por ejemplo, cómo antaño los bosques dejaron paso al pasto y cómo ahora, con el abandono del pastoreo, avanza la vegetación. También el papel de la reciella para «mantener limpio» el monte y evitar incendios. «Un pastoreo bien gestionado es un compañero formidable para la biodiversidad», subraya López.
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La segunda parada, en un bebedero para el ganado junto a la pista que sube a Soñín, sirve de base para adentrarse en fauna y flora, desde anfibios como tritones a «lo que queda del acebal».
El Colláu Lincós marca la tercera parada y en ese punto el quebrantahuesos es el protagonista, con el repaso a cómo llegó a extinguirse y cómo la Fundación ha logrado recuperarlo a través del proyecto de reintroducción en los Picos, donde actualmente existen una treintena de ejemplares y tres parejas reproductoras. La ruta continúa por una cabaña en Fresnu, ambientada con enseres donados por vecinos de Onís para conocer el modo de vida de los pastores. «Las cabañas son de piedra y sin argamasa ni chimenea», detalla Gil. El motivo, la necesidad de ahumar el queso Gamonéu. A ello añade López una mirada sobre el papel de la mujer en el pastoreo y la elaboración de queso, pues eran ellas las que «se quedaban con el ganado y los hijos cuando el hombre bajaba a segar». «Hubo muchas pastoras», recuerda el guía.
Además de conocer historia y naturaleza de Onís, la nueva iniciativa busca un impacto en la economía local. De ahí la apuesta por profesionales y recursos del propio concejo. Los itinerarios, que requieren de reserva previa, se desarrollarán hasta el 31 de agosto los lunes, martes y sábados, de 9 a 13 y de 16 a 19 horas.
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