El Principado ofrece a los pescadores la «cogestión» de la compuerta de Llanes

Tras años de espera, los problemas reseñados por los pescadores de Llanes van encontrando un hueco en la agenda del Principado. El consejero de Desarrollo Rural y Cohesión Territorial, Alejandro Calvo, visitó ayer el puerto llanisco, donde ahondó en los planes de su departamento para uno de las elementos más controvertidos, la compuerta. En la Junta General había adelantado la pasada semana que la apertura pasaría a ser «a demanda y de forma remota», con el fin de evitar que los marineros pierdan jornadas de faena por demoras en su accionamiento. Para ello, la intención de la consejería pasa por implantar una «cogestión con los pescadores», lo que requeriría de la firma de un convenio de colaboración al tratarse de un «servicio público». «Creemos que si esa es la mejor solución, podemos avanzar en ella», dijo Calvo.

Señaló además que el primer paso consistirá en «recuperar el sistema de sensorización» de la compuerta, pues ese mecanismo «garantiza que se abra con las condiciones de mar adecuadas». Los pescadores le recordaron por su parte que «no piden apretar el botón» de apertura, sino un enlace directo para formular la petición y una respuesta ágil.

Más allá de la gestión de la compuerta, los marineros llaniscos reivindican desde tiempo atrás amarres más seguros en el puerto interior, la reparación de la luz y atajar el filtrado de arena. El compromiso de Calvo fue regresar a Llanes una vez finalizado el dragado con un anteproyecto que recoja las necesidades más urgentes. «Nuestra prioridad es seguir facilitando la vida y el trabajo de la flota tradicional y artesanal. Iremos dando respuesta a todas las demandas», afirmó.

Una de esas peticiones que finalmente ha encontrado respuesta es la del dragado de la dársena pesquera, en marcha desde esta misma semana. Tanto el consejero como la directora general de Infraestructuras Viarias y Portuarias, Esther Díaz, visitaron ayer las obras, que cuentan con un plazo de ejecución de cuatro meses. La meta es, no obstante, culminar la intervención antes de final de año. «Esta actuación resuelve la situación más estructural, pero tendrá que tener continuidad con una actividad ordinaria de mantenimiento que evite llegar a esta situación», indicó Calvo.

Sobre las demandas del sector de aumentar la profundidad del calado, explicó que «hay una zona en el acceso a la dársena que es material más duro en la que habrá que determinar cómo se puede actuar sobre él. Eso condicionará la cota de dragado del resto de la dársena».

La intervención, adjudicada por 379.940 euros a la empresa Excade S. L., prevé la extracción de 5.000 metros cúbicos de sedimentos, principalmente «arenas, fangos y ocles». La acumulación de algas, un problema habitual en la zona, generó precisamente en los últimos días malos olores y un tono blanquecino en las aguas.

Durante la visita de ayer, el alcalde, Enrique Riestra, y el concejal de Agroganadería, Xuan Valladares, entregaron al consejero la documentación que acredita que habían solicitado la construcción de la pista de acceso desde Vibaño hasta el monte de Llabres, así como un «plan de acción conjunto» para el medio rural.