Los pueblos se llenan con Nuestra Señora

Es una de las vírgenes con más devotos en la comarca oriental y ayer cerca de una decena de localidades salieron a la calle para demostrarlo. La festividad de Nuestra Señora de la Asunción reunió un año más a residentes y foráneos en las eucaristías y consiguientes procesiones celebradas en pueblos de los concejos de Llanes, Ribadedeva, Colunga, Ribadesella, Onís o Piloña.

Un sol resplandeciente en el cielo y una jornada festiva en la región contribuyeron a llenar los templos parroquiales y las calles de aquellos pueblos donde la advocación de María ejerce como patrona. Es el caso de la villa de Llanes, que en la pasada jornada le rindió su tradicional homenaje. A primera hora de la mañana la banda de música de San Martín del Rey Aurelio, dirigida por José Félix Ordiz Montañés, recorría las arterias principales en animado pasacalles. Junto al director desfilaban Rafael Romero, Javier Abello y David Prada, presidentes de los tres bandos festivos, y un representante de la Cofradía de Pescadores Santa Ana. Los músicos interpretaron melodías tan conocidas como 'Levando anclas' y 'No lo olvido'.

La eucaristía posterior fue oficiada por el párroco, Florentino Hoyos, y cantada por el coro parroquial que interpretó la 'Misa llanisca'. Al término de la función religiosa tuvo lugar una concurrida procesión que transitó por las calles del casco histórico de la villa. Al frente, con el estandarte parroquial en sus manos, caminaba Juan Antonio Sotres Dueñas y por detrás aparecían las andas con la imagen de la Virgen, en cuyos varales oficiaban como costaleros representantes de los bandos festivos llaniscos. El manto floral estaba formado por claveles, margaritas, siemprevivas y nardos. El cura, el alcalde, los concejales, la banda de música y una multitud de llaniscos y foráneos cerraban el cortejo.

Al finalizar los actos religiosos, el epicentro festivo se trasladaba al salón de plenos del Ayuntamiento de Llanes. Allí, el alcalde, Enrique Riestra Rozas, le entregaba el pergamino que de forma oficial reconoce al médico Ramón Sobrino de la Vega como Hijo Predilecto del Concejo de Llanes. El regidor calificó el acto y el día de la Patrona como «esplendorosos» y significó que iba a proceder a la «entrega oficial e institucional de un nombramiento que desde el primer momento suscitó apoyo, satisfacción y alegría, tanto en el Ayuntamiento como entre el vecindario». Emocionado, Ramón Sobrino, arropado por una familia muy numerosa, tomaba posesión del pergamino y recibía aplausos y ovaciones que duraron varios minutos.

Sin salir del concejo llanisco, la de Andrín es otra de las grandes celebraciones en honor a Nuestra Señora. Declarada fiesta de interés turístico regional, fueron cerca de dos centenares de personas, tanto locales como turistas, los que se acercaron al pueblo para presenciar su colorida ofrenda de ramos y procesión, amenizada por el grupo de gaitas Principado. Por su parte, en Poo de Llanes la fiesta comenzaba pasado el mediodía con la salida de los ramos de la bolera y una amplia comitiva que se dirigió hacia la iglesia para celebrar la eucaristía. Cerró el programa festivo la exhibición de bailes regionales, en sesión de mañana y tarde.

Onís es otro de los concejos que vive con mayor fervor el 15 de agosto, consagrado a Nuestra Señora del Castru. El día grande comenzaba pronto en la capital oniense, con cohetes y pasacalles a cargo de la banda de gaitas Villa de Xixón, para dar paso a continuación a la procesión de retorno de la virgen a su capilla. En el recorrido la imagen estuvo arropada por un centenar de mozas.

Por su parte, en Colombres viven estos días las festividades de La Sacramental y La Asunción. A Nuestra Señora rindieron homenaje los ribadedenses con una celebración religiosa cantada por el coro local. En la vecina Peñamellera Baja, los festejos llegaron a Cuñaba, donde no faltó la procesión por las calles del pequeño pueblo, situado a los pies de los Picos de Europa. En la localidad colunguesa de La Isla y en la riosellana de Meluerda se repitieron los actos litúrgicos y, en Piloña, Priede y Samalea no faltaron a la misa y subasta del ramu en una mañana amenizada por la banda de gaitas El Sidrón.