Rescatan a un hombre en los acantilados de Ribadesella y a una montañera en Cabrales

Con el inicio de la temporada alta, los rescates comienzan a repuntar en el oriente. Ayer fueron dos, en mar y montaña, y sin heridos graves. Ambos percances se registraron en torno a la una de la tarde, el primero de ellos en la vertiente cabraliega de los Picos de Europa, entre collado de Pandébano y Bulnes. El aviso al Centro de Coordinación de Emergencias llegó a las 13.10 horas y en la llamada se explicó que una mujer procedente de Cantabria se había torcido el tobillo. Hasta el lugar del incidente se trasladó el Grupo de Rescate del Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA), a bordo del helicóptero medicalizado. La médica rescatadora atendió a la afectada en el lugar de los hechos, inmovilizándole la extremidad lesionada con una férula hinchable y otra férula rígida. Presentaba una fractura de tobillo y fue evacuada en la aeronave al Hospital Grande Covián de Arriondas.

Mientras el Grupo de Rescate se encontraba en esa intervención en Cabrales, a las 13.34 horas llegó otro aviso al Centro de Coordinación de Emergencias alertando de la presencia de un hombre enriscado en un acantilado en la playa de Berbes, en Ribadesella. Estaba «cercado en las rocas por la marea» y los socorristas «explicaron que el lugar en el que se encontraba el afectado imposibilitaba su salida por mar», apuntaron en el SEPA. Por ello fue necesario aguardar a la llegada del helicóptero medicalizado. Una vez en los acantilados, un bombero rescatador accedió hasta el hombre, que se encontraba ileso. Tras colocarle el arnés de rescate, ambos fueron extraídos del lugar mediante otra operación de grúa. El hombre fue finalmente trasladado hasta el arenal, junto a los socorristas.

Este mismo sábado, el SEPA había pedido «prudencia para evitar riesgos innecesarios en la playa y la montaña». En el monte recomiendan «planificar las rutas, utilizar equipos apropiados y consultar las previsiones meteorológicas»; mientras que en la costa aconsejan «evitar zambullidas desde las alturas, atender las orientaciones del personal de salvamento y tener en cuenta los ciclos de las mareas». El pasado verano realizaron 132 operaciones de rescate y 87 intervenciones de salvamento de personas a bordo del helicóptero.

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