Podemos e IU instan al PSOE a negociar con ellos el «corazón social» de las cuentas sin Ciudadanos

A medida que se acerca la fecha del 2 de diciembre, el día que el Gobierno se ha puesto como meta para llevar el proyecto de presupuestos a la Junta, la negociación sobre las cuentas regionales del próximo ejercicio gana en intensidad. Esta mañana, en una comparecencia conjunta, Podemos e IU han reclamado al Gobierno que negocie con ellos el «corazón social» de las cuentas del próximo ejercicio como «primera pata» para seguir avanzando en las conversaciones, una ecuación con la que se podría dejar fuera a Ciudadanos, que «cuestiona», sostienen, las políticas sociales. «La derecha es prescindible», sentenció la portavoz de IU en la Junta, Ángela Vallina, quien arrojó dudas sobre la formación naranja. «Si vamos a retroceder en derechos sociales porque haya una fuerza que así lo exige para aprobar presupuestos cuando existe una mayoría de izquierdas, lo lógico es que un Gobierno progresista vaya por el lado de la izquierda. Además, el año pasado pasó lo que pasó con Ciudadanos», señaló en referencia al cambio en la orientación del voto de cuatro de sus cinco diputados en la sesión definitiva de aprobación de las cuentas regionales tras una orden de la dirección entonces interina en Madrid.

Tanto Podemos como IU mostraron su preocupación por el partido naranja, más después de que su presidenta, Inés Arrimadas, se descolgase ayer de la probación de los Presupuestos Generales del Estado por no «cumplir las condiciones para que los pueda apoyar un partido liberal, de centro y moderado». «No bloqueamos el diálogo con nadie, pero Ciudadanos está haciendo todo lo posible para que las cuentas del Gobierno regional se parezcan lo menos posible a las del estatal. Tiene una visión conservadora y es un obstáculo a la reactivación social», defendió el diputado y secretario general de Podemos, Daniel Ripa, quien sostiene que lo que debe suponer el presupuesto asturiano es un «escudo social» para hacer frente a la crisis.

Las dos formaciones, que señalan tener coincidencia política en el diseño de ese «corazón social» de las cuentas, fijan en el fondo de rescate, las políticas de bienestar social y los acuerdos de concertación las cuestiones que deben formar parte de ese núcleo desde el que luego seguir negociando.

La portavoz de IU señaló que su formación sigue avanzando en las negociaciones con el Gobierno. «La negociación va bien, hay cosas por cerrar, pero seguimos avanzando». Por su parte, Daniel Ripa señaló que hay «puntos» en los que su partido no está «avanzando lo suficiente» en las conversaciones con el Gobierno. «En sanidad, educación, empleo e industria no estamos avanzando, pero esta es la primera base sobre la que tenemos que dialogar».

Por su parte, el PP planteó ayer al Gobierno sus propuestas, que dio a conocer esta mañana. Los populares, por boca de su presidenta y portavoz, Teresa Mallada, y de su portavoz adjunto, Pablo González, presentaron un decálogo para orientar el fondo de rescate que prevé poner en marcha el Gobierno con el que «dar solución» a los problemas que les han planteado los diferentes sectores. Son propuestas «realistas, rigurosas y solventes», defendió Teresa Mallada. Entre los planteamientos que incluyen los populares para este fondo de rescate está que incluya a «todos» los sectores afectados por la pandemia y que se haga además con carácter retroactivo, retrotrayendo las ayudas al mes de marzo. Además, el PP plantea que el fondo contemple compensaciones a los ayuntamientos que ya han puesto en marcha líneas de apoyo para los sectores afectados.

Los populares plantean además que las ayudas se concentren en los profesionales más afectados, calculando la merma de ingresos que han tenido a causa de la pandemia para primar a aquellos que peor situación presentan. «La idea es que esto no se convierta en un café para todos», señaló Pablo González. El PP presentó además sus propuestas para el mapa de estrategias dibujado por el Principado con una crítica por no haber incluido una de las que, a su juicio, no figura en el documento, la que tiene que ver con la covid. «Es un cajón de sastre, son estrategias anteriores a la covid», señaló Pablo González, quien defiende que esta línea debe ser «una prioridad transversal».

Los populares criticaron que el Gobierno no les haya facilitado toda la información económica que reclamaron y señalaron que, en su opinión, la negociación de las grandes cifras «sigue abierta». «Los datos aportados por el Gobierno nos hacen muy difícil apuntar objetivos serios de deuda o de ajuste fiscal», afirmó Pablo González.

La respuesta del Principado no tardó en llegar. La consejera portavoz, Melania Álvarez criticó la «inconcreción» de los planteamientos de los populares y las «pocas ganas de acuerdo» que a su juicio demuestran. «Con el pretexto de la ausencia de datos, se limitan a los principios que debería reflejar el fondo de rescate. Denota cierto desinterés». Melania Álvarez destacó que tanto Ciudadanos como Podemos, Foro e IU llevan «semanas esforzándose» en presentar propuestas y tratar de alcanzar un acuerdo. «Del principal partido de la oposición esperábamos mucho más. Más voluntad negociadora y más aportaciones concretas».

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