Un recluso muere de madrugada en su celda del centro penitenciario de Asturias

Un recluso perteneciente al módulo 9 del centro penitenciario de Asturias falleció la madrugada del lunes en su celda. El preso, cuya identidad corresponde a las iniciales P. J. M. C. y cumplía condena por tráfico de drogas, fue encontrado inconsciente por su compañero de celda, quien se encargó de dar la voz de alarma. Los médicos que acudieron en auxilio del preso nada pudieron hacer por su vida.

El juzgado de guardia ha abierto una investigación para tratar de esclarecer las causas de la muerte. Por el momento se sospecha de una posible sobredosis de drogas o de medicamentos. Esto último estaría relacionado con el hecho de que los tratamientos médicos para todo el fin de semana se reparten los viernes, lo que podría haber fomentado una posible ingesta excesiva de medicamentos. Hoy, tendrá lugar la autopsia del fallecido en el Instituto de Medicina Legal de Asturias, lo que confirmará si la muerte fue efectivamente por sobredosis o por otra causa.

Algunas asociaciones como Tu Abandono me Puede Matar (TAMPM) se han apresurado a criticar el poco control que existe por parte del personal de la prisión ante la entrada de drogas en la cárcel. Esta circunstancia se atribuye principalmente a la falta de personal en el centro penitenciario. Desde la asociación también denuncian la falta de control de los presos a la hora de administrar los tratamientos de forma adecuada, puesto que los médicos ya no pasan consulta diariamente y los medicamentos para todo el fin de semana se reparten en un solo día.

Siempre según TAMPM, actualmente el servicio médico de la cárcel de Asturias se encuentra al borde del colapso, con la mitad de sus plazas sin cubrir y la inminente jubilación de varios de los facultativos. La falta de atención médica a muchos reclusos propicia que las patologías mentales que casi la mitad de ellos padecen no puedan ser detectadas ni prevenidas. Esta desatención deriva, fundamentalmente, en altercados y sucesos como el acontecido en la madrugada del lunes. O como el sucedido el pasado sábado, cuando un preso procedente del País Vasco amenazó y agredió a varios funcionarios, después de que se le negase el acceso a la tienda-bar ubicada en el módulo de respeto de la cárcel -aquel al que tienen acceso los reclusos que han demostrado un buen comportamiento con el resto de internos y funcionarios-.

Ante esta situación, cada vez más tensa, los sindicatos asturianos reclaman al Principado que asuma la responsabilidad de la atención médica a los presos, con el fin de evitar más altercados y nuevas muertes.

Temas

• Prisiones
• Principado de Asturias
• Asturias
• Sucesos en Asturias