El rector quiere tener enfocada la «estrategia» de la Universidad antes de Semana Santa
El claustro advierte sobre la desafección de la comunidad universitaria con la institución, la falta de presupuesto y la «trampa» de los rankings
OLGA ESTEBAN
GIJÓN.
Sábado, 19 de febrero 2022, 01:08
Menos de dos meses. Es el plazo que se ha dado el rector para tener «enfocada la estrategia de la Universidad de Oviedo para ... los próximos años», una estrategia y unas decisiones que «van a marcar su futuro». Antes de Semana Santa todo debería estar aclarado. Para entonces, el equipo rectoral debería haber rehecho sus planes (estratégico, de titulaciones y de infraestructuras) incluyendo las alegaciones y propuestas que se estimen oportunas de entre las 300 presentadas y los documentos definitivos deberían haber pasado por los órganos de gobierno de la institución. De hecho, ayer mismo insistió en que la idea es convocar un claustro en marzo y llevar ya dichos documentos. Después será el momento de sentarse a hablar con el gobierno del Principado, aunque todo apunta a que el diálogo tiene ya partes importantes avanzadas, a juzgar por el respaldo público del consejero de Ciencia, Innovación y Universidad, Borja Sánchez.
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Ignacio Villaverde anunció estos plazos en el claustro celebrado ayer, de forma 'online', después de que sus miembros tomaran posesión en enero, tras un parón importante en su actividad debido principalmente a la pandemia. Una sesión, la de ayer, que sirvió para elegir sus representantes en el Consejo de Gobierno, cuestión importante siempre y más ahora con todo lo que está en juego. Ya lo dijo el decano de Ciencias, José Manuel Noriega, claustral que optaba al Consejo de Gobierno: «Se avecina una etapa densa y complicada». Quizás por eso, hasta el exrector, Santiago García Granda, presentó su candidatura al órgano de gobierno, en el que entró. Un paso, admitió, que «puede resultar extraño e inusual», pero que justificó en su intención se seguir participando en la toma de decisiones de la Universidad y en su experiencia en los cargos de gestión. De hecho, aprovechó la ocasión para defender que «los rectores en activo deberían tener un papel en el máximo órgano de gobierno». En total, se presentaron 30 candidaturas para 20 plazas.
Mucho se habló también ayer del papel que juega el propio claustro en la vida universitaria. Algunos de sus miembros alzaron ayer la voz para llamar la atención sobre la bajísima participación en sus elecciones y sobre la sensación general, especialmente entre los estudiantes, de que no ven en el órgano una herramienta real de participación en la toma de decisiones. Villaverde no pudo más que mostrarse de acuerdo y preocupado por la desafección de la comunidad con sus órganos de gobierno. «La pandemia ha tenido un efecto colateral, adormecer el ritmo institucional que tenía la universidad», admitió. Además, se mostró dispuesto a revisar la normativa de las elecciones al claustro para incentivar una mayor participación y diseñar alguna campaña de movilización.
«Colchón financiero estable»
También hubo oportunidad en el claustro de ayer de hablar sobre la falta de financiación general de las universidades, algo que admitió Villaverde, aunque felicitándose de que en el caso de la asturiana «tenemos una situación financiera económica y saneada», además de recordar la negociación del contrato programa con el Principado que «nos garantiza un colchón financiero estable y que nos permitirá realizar nuestra función de forma eficiente». Por último, y tras la participación de algunos claustrales, el rector se refirió al «punto de trampa» de algunos rankings universitarios, con los que «no debemos obsesionarnos», sino tomar como herramientas de reflexión. Finalmente, Villaverde anunció su intención de buscar alianzas con otras universidades, como las de Galicia y León, «para crecer y compartir», con las que ha estado reunido hace poco.
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