Salud se prepara para hacer frente al aumento de las listas de espera tras el estado de alarma

El Servicio de Salud del Principado de Asturias (Sespa) tiene dos objetivos principales en este momento. Por un lado, abordar el previsible aumento de las listas de espera tras el estado de alarma. Y por otro, elaborar un plan de contingencia, esto es, «evaluar las necesidades» de camas de hospitalización y de UCI para poder desmantelar el hospital de campaña instalado en el recinto ferial Luis Adaro de Gijón. El coste del equipamiento 'H144' ascendió a 450.000 euros, y cuenta con 144 camas destinadas a pacientes afectados por COVID-19 con síntomas leves. Nunca ha llegado a utilizarse, puesto que no se desbordó en ningún momento la capacidad de los hospitales asturianos durante la crisis sanitaria.

La directora gerente del Sespa, Concepción Saavedra, abordó estas actuaciones en una comparecencia presencial y telemática en la que intervino también el director general de Salud Pública, Rafael Cofiño, tras la celebración del consejo de administración del Sespa. Respecto a las listas de espera, Saavedra indicó que «nunca se dejó de hacer actividad. Se trabajaba en todo lo que era urgente, no demorable o preferente durante la COVID-19. Se hizo también el resto de actividad pero no a los niveles que estábamos haciendo antes de la pandemia, por lo que ahora tenemos que recuperar todo lo que no se realizó». En el ámbito hospitalario, señaló, ya se está trabajando en citar lo que no se llevó a cabo durante estos meses.

Los últimos datos publicados en relación con las listas de espera corresponden al mes de febrero, antes de que se desatara la crisis sanitaria. 23.634 personas se encontraban en lista de espera quirúrgica estructural, además de las que aguardaban tras rechazar ser operados en un hospital alternativo y los transitoriamente no programables. También en febrero, 72.441 asturianos esperaban por una primera consulta con un especialista, mientras que 31.305 aguardaban por pruebas diagnósticas pendientes. Todo hace indicar que esas cifras habrán empeorado en estos meses.

En este marco, Saavedra avanzó que están trabajando con los coordinadores médicos y responsables de enfermería de los diferentes servicios para priorizar las pruebas y consultas a realizar en hospitales. «Estamos optimizando también todos nuestros recursos, aumentando, al igual que hicimos durante la pandemia, las contrataciones para poder dar respuesta a esa asistencia sanitaria», detalló.

Entre estas actuaciones, se han puesto en marcha de nuevo los planes especiales que ya había previos a la pandemia y que se han recuperado. «Se está trabajando en actualizar esos planes para poder también con ellos garantizar la recuperación tras la COVID-19», expuso.

Por su parte, Cofiño insistió en que la crisis sanitaria continúa. La situación, recordó, seguirá siendo «crítica» en los próximos meses pese a que se haya rebajado la curva de incidencia con las medidas de confinamiento. «No podemos perder la percepción de riesgo, no hemos vuelto a la normalidad», subrayó.