Un joven de la villa condal acude a los contenedores de la Plaza de la Cruz, unos de los más concurridos, para reciclar una bolsa de cartón. P. NOSTI

Grado y Noreña se ponen a la cabeza del reciclaje en la zona centro de Asturias

Ribera de Arriba y Nava se quedan a la cola de la tabla al separar menos del 9% de los residuos generados en sendos concejos

M. RIVERO

NOREÑA/RIBERA DE ARRIBA/GRADO/OVIEDO.

Lunes, 10 de mayo 2021, 00:32

Grado y Noreña pueden presumir de ser los concejos del centro de Asturias que mejor tasa de reciclaje han tenido en 2020. Con un 23,29% y un 23% respectivamente, la villa moscona y la condal han separado 1.110 y 649 kilos del total de 4.768 y 2.822 kilos que se han gestionado en sendos municipios.

Publicidad

Por otro lado, según los datos recogidos por el Consorcio para la Gestión de los Residuos Sólidos de Asturias (Cogersa), son los ayuntamientos de Nava y Ribera de Arriba los que deberán ponerse las pilas para incentivar la selección de basura, ya que con un 8,58% (216 kilos) y un 8,39% (111 kilos) de residuos separados son los municipios más alejados del 50% fijado como objetivo por la Unión Europea.

El siguiente consistorio más alejado de las cifras pautadas por el ejecutivo europeo es Bimenes con una tasa del 13,50%. Por su parte, Llanera, aunque ha descendido del 24,71% al 20,58%, continúa en el podido de los concejos más comprometidos con la gestión de residuos y recientemente ha implementado un sistema de recompensa en sus contenedores amarillos, donde ya había aumentado un 13,30% su uso.

Las claves del éxito

Las cifras de Grado y Noreña no son casuales. En el primero, su concejala de Medio Ambiente, Elsa Suárez, considera que «aunque queda mucho por hacer», las campañas de concienciación han dado sus frutos y ya son muchos los vecinos de la zona rural que se han puesto en contacto con el consistorio para pedir contenedores de reciclaje.

«Es cuestión de organizarse para saber qué día se recoge cada cosa», insiste la edil. También ha sido clave el haber sido municipio piloto de la instauración del cubo marrón o la buena utilización del Punto Limpio, recuerda Suárez. «En casa empezamos por mi hija, por una actividad del colegio y al final se nos quedó la costumbre», recuerda Amalia Salgado, vecina del concejo. A otros como Joaquín Vereda les «cuesta», pero procuran llevar al cubo «al menos las botellas de cristal».

Publicidad

También en Noreña han apostado por el contenedor marrón y han sumado la reutilización de aceite; las constantes iniciativas para dar a conocer a los vecinos las ventajas de la gestión sostenible de los residuos. Y los contenedores casi siempre llenos dan fe de su funcionamiento. «Hemos hecho una inversión de 100.000 para implantar quince puntos de reciclaje en zonas urbanas e industriales», destacó el edil de Medioambiente, Pelayo Suárez.

La «cercanía y facilidad» hacen que los noreñenses se animen, por lo que también se movieron contenedores como el que estaba en la zona de la Luz a Fuentespino. «Igual si tuviera que llevarlo en coche o caminar con ello no lo hacía tanto, pero aprovecho cuando bajo al perro para ir tirando alguna botella o 'brick' de leche», constata María Pereda. Aun así queda quien se resiste o es escéptico con el proceso. «Yo creo que al final todo va al mismo lado», asegura José Ramón Cuesta.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

1 año por solo 16€

Publicidad