El acusado de asestar 15 puñaladas a su expareja: «Pido perdón, me siento terriblemente avergonzado»

«Pido perdón por lo que hice, me siento terriblemente avergonzado». Son las palabras que M.R.A., el acusado de intentar asesinar a su pareja de quince cuchilladas hace dos años el Lugones, pronunció esta mañana ante el tribunal de la Sección Tercera de la Audiencia Provincial ovetense, donde aceptó nueve años de prisión, tras reconocer los hechos. La reducción de la condena se produce después de que el Ministerio Fiscal retirase el agravante de parentesco y aplicase el atenuante de confesión. Sin embargo, rechazó la petición de la acusación particular en la que solicitaba que indemnizase a la víctima con 328.000 euros.

Al no existir acuerdo por la responsabilidad civil del acusado, fue necesario la comparecencia de las dos peritos encargadas del caso, quienes aseguraron que el rasgo postraumático que sufre la víctima es «moderado», pero que «podría realizar el trabajo que estaba haciendo» antes de que ocurriese el suceso.

La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de un delito de intento de asesinato y, por eso, pidió la inhabilitación absoluta durante el tiempo de la condena y la medida de libertad vigilada por un período de cinco años y que se imponga al procesado la prohibición de aproximarse a menos de quinientos metros de la víctima durante dieciséis años. Y en concepto de responsabilidad civil, solicitó una indemnización de 115.000 euros por las lesiones, secuelas, daños morales y psicológicos provocado, y al SESPA, la cantidad que se acredite en ejecución de sentencia por los gastos de asistencia sanitaria prestada a la víctima.

Los hechos ocurrieron el febrero de 2019. Tal y como recoge en el escrito de acusación el acusado y la víctima mantenían una relación de cariz íntimo. El procesado, pasado el tiempo, «comenzó a mostrar una actitud obsesiva y controladora» hacia su compañera, que decidió terminar con él. Tras una noche de copas con amigos en la que ella decidió ignorar los insultos y desdenes de su expareja, él se personó en el bar antes de abrir, «entró sin previo aviso e iniciaron una discusión. En un momento dado, accedió al almacén y cogió un cuchillo y se lo clavó por la espalda». Hasta quince veces, según la Fiscalía. El juicio quedó visto para sentencia