La foguera de Trasona dejó cinco heridos en 2017

Los rituales de fuego son en sí mismos un peligro si no se dan las condiciones de seguridad reglamentarias. Más cuando se desencadenan una serie de fallos, que fue lo sucedido el año pasado en la hoguera de Trasona, que rendía homenaje a la mina. La noche se saldó con cinco heridos leves tras un fallo en la quema de la pira.

La compañía teatral Nun Tris se viene encargando del baile y el espectáculo previo a la quema de la hoguera. El año pasado para rendir el homenaje pretendido a la minería utilizaron bengalas y antorchas. Un fallo hizo que una de estas cayera sobre la estructura de madera, desencadenando el fuego antes de tiempo. El contratiempo no quedó ahí, además de iniciar el ritual de San Juan antes de las doce de la noche, la compañía había dejado cargas de fuegos artificiales cerca de la hoguera, que al encenderse los hizo estallar sin orden ni previsión alguna.

Parte de la pirotecnia alcanzó incluso el otro lado de la carretera, donde estaban sentadas decenas de personas para disfrutar de la quema de la hoguera desde las alturas, mientras que algunas cargas salieron en horizontal directas contra la gente apostada alrededor de la hoguera, que ese momento en la zona del hórreo del pantano de Trasona se contaban por cientos.

Aunque muchos se apartaron rápidamente otros no vieron venir los rescoldos, que les produjeron pequeñas heridas, que no revistieron gravedad. Uno de los afectados fue un pequeño, que precisó ser atendido por los sanitarios que se encontraban en las inmediaciones del pantano en ese momento.

Muchos de los asistentes salieron corriendo hacia la zona baja del hórreo y otros hacia el prao donde estaba ubicado el escenario para las actuaciones musicales. En los primeros minutos de desconcierto, sin saber qué había pasado, hubo quejas, gritos y descontrol, pero una vez se quemaron todos los cartuchos de los fuegos artificiales las cosas volvieron a la calma.

Finalmente fue más el susto que las consecuencias, aunque la experiencia vivida obligó al Ayuntamiento de Corvera a extremar este año las medidas de seguridad en el perímetro de la hoguera, que para esta edición se aumentó con el fin de evitar este tipo de incidentes. Además, se activó un protocolo específico para el momento del encendido de la pira.