«Los agentes del CNI muertos en Irak fueron héroes que lo dieron todo»
Fernando Rueda presentó su libro 'Destrucción masiva', en un acto del Ateneo Jovellanos apoyado por el Aula de Cultura
P. A. MARÍN ESTRADA
gijón.
Jueves, 12 de marzo 2020, 00:35
A pesar del glamur con el que el cine y la novela han dotado a los espías, entre quienes han ejercido como tales abundan los héroes anónimos y olvidados. Un ejemplo de ello fueron los españoles José Carlos Rodríguez, Alfonso Vega, Carlos Baró, José Ramón Merino, José Manuel Sánchez, José Lucas Egea, Ignacio Zanón y su mando, el asturiano Alberto Martínez. Eran agentes del CNI y murieron asesinados en Irak, donde trataban de averiguar si el régimen de Saddam Hussein contaba con armas de destrucción masiva y tenía vínculos con Al Qaeda. Hicieron su trabajo informando a sus superiores de que no había prueba de ello, pero fueron ignorados por un gobierno que se había embarcado en una guerra basada en ese supuesto, y seguirían cumpliendo con su deber hasta el final como apoyo a las tropas españolas. El periodista y escritor Fernando Rueda, uno de los mayores expertos en espionaje, ha rescatado su historia en la novela 'Destrucción masiva' (Roca) que ayer se presentó en un acto del Ateneo Jovellanos apoyado por el Aula de Cultura de EL COMERCIO. Mañana hará lo propio, a las 19.30 horas, en el Aula de Cultura de LA VOZ DE AVILÉS.
Publicidad
Ninguno de los ocho protagonistas ni su compañero José Antonio Bernal -muerto antes en atentado- «fueron reconocidos como héroes que lo dieron todo a cambio de nada», en palabras de su autor, quien con este relato basado en hechos reales -que indaga en la parte más humana- busca al menos que se recuerden sus nombres y así rendirles «justicia poética», como apuntó la responsable del Aula, María de Álvaro. Martínez, el agente asturiano, es personaje central de una crónica que comienza con su llegada a Bagdad en 2000. Él y sus compañeros comprobaron a fondo la inexistencia del principal argumento de la intervención aliada, y se quedaron «espeluznados», afirmó el periodista, al oír a Aznar asegurar lo contrario. Reabrir ese debate no es su propósito, señaló Rueda, aunque recordó que, a diferencia de Bush y Blair, el ex presidente español «nunca pidió perdón». Respecto a si se pudo evitar la tragedia, fue claro: «Por decirlo fino, los protocolos de seguridad no funcionaron». Su libro devuelve ahora la memoria y el honor a estos héroes.
1 año por solo 16€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión