La mitad de las empresas culturales asturianas factura menos de 50.000 euros anuales

Estas buenas cifras se vieron inevitablemente mermadas por la pandemia y, por eso, en 2020 la facturación bajó hasta los 176 millones, lo que supuso un descenso medio del 23,2%. Y ese empeoramiento en los ingresos se acentuó especialmente en algunas actividades como la posproducción de cine, vídeo y televisión que llegó al 87,6%. Esas malas noticias contrastan, sin embargo, con la edición de videojuegos que subió un 48,3% en sus ventas; la producción cinematográfica y de vídeo, que mejoró un 36,2%, y la grabación de sonido y edición musical, que ascendió un 6,8%.

Pero hay mucho más, ya que este informe desgrana todos los detalles de una industria que se compone de 1.654 empresas (datos de 2020, último año del que hay información oficial). De todas esas compañías, 626 son personas jurídicas, lo que supone el 37,8%, y el resto, 62,2%, personas físicas, generalmente autónomos que, en casos excepcionales cuentan con algún empleado. Los sectores en los que se registran mayor número de empresas son el de las librerías (456 establecimientos), actividades de fotografía (252), actividades relacionadas con la impresión y las artes gráficas (246 empresas), edición de libros (108) y producción cinematográfica o de vídeo (105).

Y de todas estas empresas culturales, el 53,9% facturó menos de 50.000 euros en el año 2019. Por su parte, un 18,5% de las compañías registró una facturación de entre 50.000 y 150.000 euros y solo un 5,4% ingresó más de 600.000 euros, registrándose las mejores cifras en las librerías, los promotores y salas musicales y las editoriales. Eso sí: un 79% de las empresas de este sector vieron notablemente reducidos sus ingresos, a causa de la pandemia. Las más afectadas fueron las pertenecientes a las artes escénicas y los promotores y las salas musicales. El descenso medio en volumen de ingresos fue del 41,8%, aunque este porcentaje llega a subir hasta el 55%, entre los artistas y grupos musicales.

Aún hay más porque esta radiografía del sector profundiza incluso en la procedencia geográfica de los ingresos. Esto deja ver que seis de cada diez euros ganados por la industria cultural se generan en Asturias, concretamente, un 62%. Del dinero restante, un 30,2% procedía de otros lugares de España y un 7,8%, del extranjero. Las librerías, el cine y el audiovisual, las artes escénicas y los artistas y grupos musicales son los sectores en los que los ingresos generados en el Principado son superiores a la media, mientras que los promotores y las discográficas dependen en menor medida de la región. Entre todos estos datos, cabe destacar que el 23,3% de los ingresos generados por las galerías de arte procede de fuera de España.

Y siguiendo con la vista puesta en el dinero, la industria cultural asturiana genera la mayor parte de sus ingresos (un 64,7%) a partir de ventas realizadas al sector privado. Pero si nos fijamos en los ingresos procedentes del sector público, se comprueba que las artes escénicas, el cine y el audiovisual son las empresas que reciben más dinero público.

Por último, vamos a prestar atención al personal de las empresas del sector. La plantilla media de las compañías crece en 2022 hasta situarse en 4,1 personas trabajadoras, un dato superior al anterior a la pandemia (3,9). Todas estas cifras dan cuenta del estado de un gremio que seguirá en el punto de mira, ya que tal y como anunció la consejera de Cultura, es necesario «contar con datos de manera continuada», por lo que ya está encargada la actualización de este estudio.