El Riverland estalla con mucho ritmo

Una cola kilométrica de jóvenes daba ayer la bienvenida al Riverland, el último gran festival del verano en Asturias. Fueron cientos los chavales que llegaron ya por la mañana a Arriondas –en autobuses y en coches– cargados de tiendas de campaña, sacos de dormir y sillas y mesas plegables para resistir a un fin de semana, en el que apenas va a haber tiempo para el descanso.

Ya saben bien todos los asistentes a esta cita que por delante tienen muy pocas horas de sueño, pero, eso sí: muchas horas de fiesta, amenizadas por sus cantantes favoritos. De hecho, a las ocho de la tarde comenzó la jarana porque subieron al escenario Disobey y Holyyouth para dar el pistoletazo de salida a tres días en los que tocará bailar, trasnochar y disfrutar de los últimos coletazos de agosto.

Tras las actuaciones de esos dos artistas, animaron el cotarro otros como Mushka, Juicy Bae, Hecky, Cocco Lexa y María Escarmiento. Con todos se dejaron el alma y la voz los jóvenes presentes que, ya de madrugada, siguieron disfrutando, a golpe de Abhir, MDA, El Bugg y Rico Rosa, entre una larguísima lista de nombres. Estaba previsto que la folixa continuara hasta las ocho de la mañana, momento en el que tocaría ir a dormir para coger con ganas la jornada de hoy, que dará comienzo a las 19 horas, con Raly y Cuadecuato.

De nuevo, tocará darlo todo, aunque también habrá que sacar ratos para llenar el estómago en las gastronetas de las que dispone el festival y para darse un paseo por Arriondas, una localidad que está viviendo un auténtico verano de restallu, en el que la música está muy presente.

Tanto que no habrá ni un segundo para la calma estos días porque en el Riverland se reúnen jóvenes de casi cualquier rincón de España, con muchas ganas de que este festival forme parte de los mejores recuerdos de sus veranos de juventud. Tiempo al tiempo.