Ignacio Bernardo da el gran salto a la élite nacional

El saltador ovetense está en el mejor momento de su trayectoria deportiva y se mostraba «muy contento de como está yendo la temporada. Estoy en las nubes. Todo está saliendo muy bien».

El pasado año también había subido a lo más alto en el nacional sub 23 bajo techo, pero le faltó, quizás, volver a repetir sus buenos registros, ya que «habíamos enfocado la campaña de otra manera. Nos dimos cuenta de que podíamos luchar por las medallas a nivel absoluto, por lo que este curso nos preparamos para conseguir objetivos más altos. Salió bien en el sub 23 y en el absoluto, y aunque uno siempre quiere más, la plata considero que es un éxito».

El atleta asturiano también se siente satisfecho por haber logrado un nuevo tope regional de salto de altura, puesto que «era uno de mis objetivos esta temporada y tenía la ilusión de lograrlo desde hace años. Era un récord que llevaba mucho tiempo y era mi oportunidad de superarlo. Al final, llegó. Para mí, batir el récord de Asturias, después de más de dos décadas, ha sido muy especial».

Detrás de estas medallas hay mucho trabajo, pero también una apuesta personal, ya que lleva tres temporadas preparándose en Soria. «Irme allí fue un cúmulo de circunstancias. Buscaba un entrenador de altura y un lugar donde pudiese entrenar sin mojarme como en Oviedo. Además, estaba también buscando dónde poder estudiar Ciencias de la Actividad Física y el Deporte. Todo eso lo encontré allí». No obstante, admite que «echo de menos Oviedo y siempre digo que es sla ciudad donde quiero vivir».

Pero Ignacio Bernardo ya se marca nuevos objetivos «sobre todo alcanzar la internacionalidad, que ha sido una de mis metas desde siempre». «Están los Juegos del Mediterráneo sub 23 y los Juegos Iberoamericanos, que se puede luchar por ir. Ya en otro nivel podría soñar con ir al Europeo absoluto, aunque eso será muy complicado, para ello tendría que superar los 2,22», señala.