Un estudio universitario señala que Duro Felguera contribuyó en 2019 al 1,18% de la riqueza de la región

Duro Felguera ha sido una pieza clave en el desarrollo económico de Asturias en la última década, según las conclusiones de un estudio realizado por un grupo de investigadores de la Facultad de Comercio, Turismo y Ciencias Sociales Jovellanos de la Universidad de Oviedo. No obstante, con matices y dos periodos diferenciados: 2010-2014 y 2015-2019. En el primero de ellos, con un crecimiento constante, en el segundo con una caída paulatina que empezó a dar síntomas de mejoría en 2019.

Por ponerle cifras. En lo relativo al impacto económico de Duro Felguera en la región, en 2015, suponía el 1,93% del total en el VAB (Valor Añadido Bruto) asturiano. Esta cifra equivale a 374 mil millones de euros, en la suma de sus efectos directos, indirectos e inducidos. Respecto al empleo, suponía el 1,44% del total. Si nos vamos a 2019, estas cifran han pasado a ser el 1,18% y 1,02% respectivamente.

Según explicó el investigador principal, José Baños, «por cada cien mil euros en ingresos se generan 1,23 empleos, lo que demuestra su capacidad de arrastre sobre el cojunto del tejido económico asturiano». Los mayores efectos, como parece lógico, los tuvo sobre la construcción, seguidos de la metalurgia y otras actividades profesionales. «A la vista de los resultados se confirma esa capacidad de empresa tractora de Duro Felguera».

Por su parte, el profesor José Manuel Montes señaló su rama de actividad de calderería pesada «que es una en nuestra país» como una de las fortelezas de la compañía. Pero Montes hizo hincapié en el gasto en I+D que se ha hecho en la última década donde «sale muy bien parada en relación con otras si tomamos como referencia el mix de negocios comparables». Trasladado a cifras, Duro Felguera ha estado en línea con la inversión asturiana pero por encima del a media nacional, un 0,45% frente al 0,23% español. Respecto al perfil de la plantilla, destacó que la mayoría se localiza en Asturias, trabajan en áreas de producción y dirección técnica, tienen más de 10 años de antigüedad y titulación universitaria, en su mayoría una ingeniería.

Preguntados, a pesar de quedarse fuera de su área de especialidad, por la situación que atraviesa actualmente y la petición de rescate al Fondo de Solvencia del Gobierno central, el profesor Montes subrayó que «es una compañía más que centenaria que se ha reinventado en su historia, y que, por tanto, no ha escrito ni mucho menos su última página». Según su anáisis, parte de los problemas vienen derivados porque «el mercado no te permite crecer a corto plazo y el mercado financiero limita la asunción de riesgos, provocando que compañías como esta se vean atrapadas en esta situación».

Por su parte, José Francisco Baños Pino, descató que «viendo la evolución de la compañía durante estos últimos años y cómo finalizó 2019, cuenta con un potencial enorme para continuar creciendo y aportando valor añadido en todos los sentidos al Principado de Asturias». Para el profesor, ese crecimiento se puede potenciar «por las nuevas áreas de negocio en que se están invirtiendo y que son algunos de los sectores con mayor proyección a nivel internacional».