«Lo que más me gusta es el asesoramiento financiero»

La falta de tiempo y la ausencia de conocimientos en campos como el financiero es uno de los obstáculos con los que se encuentran aquellos que quieren emprender. «En mi caso, lo tengo que hacer todo yo, porque ser pequeño implica que lo haces tú todo. Hay cosas que se pueden externalizar, pero otras las debes hacer porque no te renta meter a una persona solo para realizar esa tarea», explica Ana Labad, fundadora de Anchoas Hazas, con sede en Lastres.

Ese es uno de los motivos que la empujaron a buscar alternativas de financiación para la empresa. «Cuando acudes a un banco, muchas veces no te enteras de nada de lo que te dicen y te ofrecen lo que más les conviene sin estudiar lo que es mejor para tu negocio ni explicártelo», lamenta, al tiempo que destaca que «una de las cosas buenas de Asturgar es ese asesoramiento, que es neutro y estudian tu proyecto a fondo».

Esta conservera, que apostó en sus inicios por contratar mujeres con experiencia, cuenta que al principio estaba «muy perdida» hasta que recibió el asesoramiento adecuado. «Yo venía de una tienda, no tenía idea de muchas cosas», reconoce Labad, que valora la rapidez y el acompañamiento que se realiza en todo momento a lo largo del proceso, así como las condiciones ofrecidas una vez analizada la información facilitada por la propia empresa: «Nos habían hecho una oferta en el banco y, cuando le planteamos nuestro proyecto a Asturgar, nos la mejoró mucho y eso lo cambió todo».