«Tenemos músculo, reservas y fuentes de financiación, ahora mismo no urge captar más capital»

-Balance positivo. ¿Satisfechos?

-Hemos empezado muy bien. Cumpliendo con creces nuestras previsiones y objetivos. Sabíamos que todas nuestras áreas iban a mejorar. Que el control del gasto financiero y una mejor gestión nos iban a unos resultados muy positivos. Además, de toda la cifra de resultados el 80% va a reservas de la compañía, lo que nos va a fortalecer para seguir creciendo.

-Hablando de fortalezas, ¿cuáles son las que han aflorado aún más en estos cuatro meses?

-Nuestra nueva organización. Nos hemos fortalecido. Hemos creado departamentos que antes no existían, como el de compras, la oficina de desarrollo empresarial; hemos reforzado nuestro consejo de administración, hemos hecho direcciones comerciales más transversales, y creado direcciones técnicas nuevas. Esta estructura nos profesionaliza y nos hace muy sólidos. Estamos ganando concursos en Colombia cercanos a los cuatro millones de euros, cuando hace dos o tres años estábamos apartados de esa liga, y está empezando a funcionar nuestro crecimiento inorgánico. Todas las áreas están respondiendo.

-¿Alguna debilidad que haya que corregir?

-La única debilidad que le veo ahora al mercado es la falta de desarrolladores en el área de consultoría y software. La estamos sufriendo todas las compañías del sector TIC y no nos queda más remedio que acudir a otros países, principalmente Latinoamérica, para cubrir las necesidades que tenemos de estos perfiles. El resto de las cosas son vientos de cola y empresas que estamos tan bien organizadas como nosotros tenemos proyectos por delante y capacidad de crecimiento.

-Nuevamente la falta de profesionales. Se venía advirtiendo de que pasaría desde hace años. ¿Soluciones que le vea?

-A corto plazo, buscamos ese talento extranjero que podamos traer a España, de países como Perú. Ayudaría que la Administración nos facilitase ciertos canales para hacerlo con mayor agilidad. Para nosotros es un problema coyuntural, aunque esto no quiere decir que durante los próximos dos o tres años no siga existiendo el problema. Para otras áreas, como Nóminas y Recursos Humanos, tenemos nuestra propia fábrica de talento y 'diseñamos' gente para que no haya esa carencia.

-¿Y a medio y largo plazo?

-Formación, formación y formación, y que la gente vea este trabajo como atractivo. Hoy por hoy está muy bien remunerado y además el sector tecnológico permite unas ventajas que otros no pueden facilitar, como el teletrabajo. Las empresas tenemos que hacer más atractivos estos trabajos y en paralelo que se abran muchas plazas de Formación Profesional, que me parece imprescindible, y de Ingeniería Informática.

-¿Es de los que teme una posible inflación propia de los salarios por esa falta de talento?

- Hemos gestionado bastante bien el tema de los salarios. Hay perfiles que se mueven por temas económicos y no los puedes retener. Pero va a continuar. Cuando hay mucha demanda y poca oferta, los precios inflacionan. Pero no me preocupa de momento, aunque nos puede afectar a las cifras de negocio de algunas áreas. Podríamos vender mucho más en consultoría y software, y bastante más en infraestructuras, sistemas y servicios. Debemos ajustar la demanda que tenemos a nuestra capacidad de producción. Pero Seresco está muy diversificada y nos compensamos, porque en esas otras áreas sí seguimos creciendo mucho.

-Más del 90% del negocio de Seresco procede de España. Pero quieren potenciar la internacionalización. ¿Cuáles serán las áreas geográficas prioritarias?

-Portugal y Latinoamérica, y en esta última estamos haciendo foco especialmente en Perú y Colombia y seguimos trabajando en Costa Rica. Pero esto no es un corsé y veremos adónde nos lleva este proyecto. Ahora mismo estamos colaborando con una plataforma de desarrollo colombiana que ya está trabajando también para EE UU y eso podría ser una vía de entrada. Y luego compañías como la portuguesa ELO-SI, que acabamos de integrar, trabaja para países como Mozambique, Angola, Nigeria, Brasil o India, en donde hasta la fecha no estábamos. Nuestro porcentaje de negocio internacional, que puede suponer un 10% del total de la facturación global, irá subiendo poco a poco. No obstante, nosotros seguimos creciendo mucho a nivel nacional y ese porcentaje no va a ser disruptivo en ningún momento. Se irá incrementando, pero no va a haber un vuelco tan grande.

-Decía usted en una carta a inversores que Seresco estudia unas 30 compañías para futuras integraciones. Llevan tres en los últimos meses. ¿Hasta dónde quieren llegar?

-Esas 30 eran una media porque estudiamos muchas más, aunque algunas no pasan el primer filtro. No sé hasta dónde vamos a llegar. Nosotros lanzamos al mercado un mensaje de invertir unos 20 millones en adquisición de compañías, pero todo depende. Algunas son francamente interesantes y no queremos perder la oportunidad.

-¿Qué tipo de perfil les interesa?

-Toda aquella compañía que sea interesante, bien porque está establecida en una zona en la que no estamos y queremos estar o bien porque tiene un servicio que es sinérgico o idéntico con los que nosotros damos y que suma directamente.

-¿De algún tamaño concreto?

-Buscamos más la rentabilidad y la sinergia que el tamaño de la compañía. Sigea, por ejemplo, tenía 600.000 euros de facturación; SPW es una compañía de 1,2, y ELO-SI de 2,7 millones. ¿Eso quiere decir que vamos a estar en compañías de entre uno y tres millones de facturación? No. En un momento determinado podemos estar por encima. No vamos a poder comprar una compañía de 100 millones... al menos de momento (sonríe). Pero todas las que estén entorno a 3 o 4 millones son muy interesantes porque ya tienen un tamaño suficientemente importante para pivotar sobre ellas tu propio desarrollo.

-Se habló de la posibilidad de que acudieran nuevamente al mercado esta primavera para captar más capital. ¿Está sobre la mesa?

-Ahora mismo en Seresco tenemos bastante músculo, fuentes de financiación a las que podemos acudir, tenemos reservas, somos grandes generadores de caja. Hay compañías que podemos adquirir sin necesidad de acudir al mercado y hacer una ampliación de capital, que es una posibilidad que siempre va a estar ahí. Pero hoy por hoy no la contemplamos. Eso no quiere decir que después de verano nos surja una operación que pueda resultar interesante y para ello sea una buena combinación hacer una ampliación de capital y sumarla a otras fuentes de financiación.

-¿Para mirar al mercado continuo es aún pronto?

-De momento tenemos que seguir dando pasos. Hasta la fecha éramos un valor huérfano, sin analistas. Lo hicimos deliberadamente porque queríamos esperar a cerrar el año 2022 para empezar con esa cobertura y en breve empezarán a salir informes que van a dar un precio objetivo de la acción.

-¿Mantienen la cotización?

- El mercado es muy sensible. Entiendo que ahora con estos resultados, donde hemos multiplicado por cuatro el beneficio neto del año anterior, nuestro 'free float' va a reaccionar de otra forma, habrá inversores que querrán acciones y subirá la cotización a un precio objetivo más razonable.

-¿Sigue manteniendo que este era el mejor momento para saltar al parqué?

-Los temas macro nos afectan a todos, pero no podemos hacer nada. Lo que nos queda es ir haciendo nuestro trabajo. Tenemos mucha visibilidad sobre el proyecto que tenemos, y mucha capacidad de crecimiento y hacerlo muy rápidamente. El salto al BME nos sirve para profesionalizarnos más, darles una seguridad a nuestros proveedores, clientes, y accionistas. Y el objetivo que perseguíamos lo estamos consiguiendo.