La penalización de una empresa a los trabajadores que lleguen un minuto tarde

La puntualidad no es solo una virtud. Es, además, un requisito imprescindible para atender a diversas experiencias vitales. Llegar tarde a un aeropuerto puede implicar la pérdida de un vuelo; retrasarse en un examen, conseguir un suspenso asegurado. Hay sucesos que simplemente ocurren y, si uno no consigue estar a tiempo, se los pierde: el nacimiento de un hijo, la entrada de la novia en una iglesia, la función escolar…

¿Qué ocurre si un empleado llega tarde al trabajo? La polémica medida implantada por una empresa en el Reino Unido ha despertado el debate después de que una usuaria de Reddit compartiera el cartel que se encontró a la llegada a la oficina.

«Por cada minuto que se llegue tarde al trabajo, se deberá trabajar durante 10 minutos más después de las 6 p.m. Por ejemplo, si llegas a las 10:02, tendrás que quedarte 20 minutos más, hasta las 6:20», detalla el escrito. Los usuarios cuestionan la norma y se preguntan si la proporcionalidad funciona a la inversa.

Si llegas a las 9:58, ¿puedes salir a las 5:40?«, ironiza una usuaria. Otro se pregunta si la compañía pagará las horas extra o qué gana teniendo 20 minutos a sus empleados parados una vez que han completado su jornada laboral.

Lo cierto es que llegar tarde al puesto de trabajo se considera un incumplimiento de las obligaciones por parte del trabajador y, en España, puede ser sancionado por la empresa con un descuento en la nómina del tiempo de retraso, una amonestación o sanción de empleo y sueldo e incluso un despido disciplinario sin derecho a indemnización. ¿Es un minuto o dos, suficiente tiempo de retraso para emprender acciones?

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