El plan descarbonizador de Arcelor afectará a mil trabajadores de sus factorías españolas

El plan descarbonizador de Arcelor afectará a entre 900 y 1.000 trabajadores del conjunto de sus plantas en España. El grueso de estos ajustes se producirá en las factorías asturianas, puesto que es donde se van a llevar a cabo las principales actuaciones para modernizar el proceso productivo gracias al uso de hidrógeno renovable. Así lo transmitió ayer la dirección del grupo a los representantes sindicales, aunque no ofreció información detallada sobre la afectación en cada planta. No obstante, la multinacional siderúrgica aseguró que no habrá salidas traumáticas en ningún caso, pero no descarta que haya traslados desde Asturias a otros centros de trabajo del país. Mientras que los de asturianos perderán plantilla, la acería de Sestao, que la compañía aspira a convertir en la primera del mundo con cero emisiones de carbono en el conjunto de su proceso productivo, la ganará. Así, parece factible que haya cierto trasvase de trabajadores del Principado a este municipio vizcaíno.

También habrá planes de movilidad funcional, es decir, que parte de los trabajadores tendrán que recibir formación para desarrollar unas labores distintas a las que realizan en la actualidad, para adaptarse a los nuevos modos de trabajo, así como otras medidas que no impliquen despidos. Así, la reunión de ayer no sirvió para apaciguar la inquietud del millar de operarios que trabajan en las instalaciones que van a desaparecer o se van a transformar por completo: el horno alto 'A', el sínter 'B', la acería de Gijón y también el parque de carbones.

Arcelor anunció en julio su plan para descarbonizar la mitad de la cabecera siderúrgica, ubicada en Gijón. El proyecto, pendiente de recibir fondos europeos, pasa por sustituir el horno alto 'A', y el sínter que lo alimenta, el 'B', por una planta de reducción directa del mineral de hierro (DRI) para 2025. A la vez, en la acería gijonesa se instalará un arco de horno eléctrico híbrido, que pueda funcionar con chatarra y con DRI, incluso con arrabio, y se mantendrán las coladas continuas.

En el encuentro, la compañía puso sobre la mesa la importancia de reducir el absentismo y aumentar la productividad para ganar puntos frente a otras plantas del grupo en Europa.

Los sindicatos asturianos también pusieron de manifiesto su preocupación por la pérdida de capacidad productiva que conllevará el proyecto de descarbonización, el cual puede afectar al suministro del resto de plantas satélites. La multinacional calcula una reducción de 700.000 toneladas desde los 4,5 millones actuales, en beneficio de la planta de Sestao. Ante este panorama, UGT-FICA incidió en la necesidad de invertir en dos hornos eléctricos en la acería de Avilés: uno en la primera fase del proyecto, para no tener pérdida de capacidad productiva, y otro para mantenerla cuando finalice la vida del horno alto 'B'.

La representación sindical -excepto CC OO, que no acude a estas reuniones porque no las considera «vinculantes»- insistió a la dirección en que detalle en profundidad los planes industriales y el impacto que van a tener en cada planta. Sin esta información, argumentaron, no es posible hablar de empleo y de las medidas a tomar para efectuar los ajustes necesarios. Por el momento, no hay fecha para una nueva reunión, pero sindicatos y empresa se volverán a ver las caras hoy en el Servicio Asturiano de Solución Extrajudicial de Conflictos (SASEC), para intentar llegar a un acuerdo y así desconvocar la huelga planteada en las baterías de cok para reclamar mayores medidas de seguridad.

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