El PSOE busca movilizar a la izquierda y el PP intenta atraer a los votantes de Cs

Para gobernar, tanto Barbón como el popular Diego Canga saben que tienen que sumar 23 escaños. Uno podría hacerlo con Podemos e IU, a los que la encuesta de GAD3 para EL COMERCIO otorga 2 diputados a cada uno. Al PSOE le vaticina 19 o 20 diputados. El otro, Canga, contaría con sus 17 escaños de la encuesta y tendría que sumar con Vox (3-4 escaños) y Foro (1). Así las cosas, el entorno de Barbón sabe que tiene que consolidar sus propias cifras (en la circunscripción occidental la encuesta le resta un diputado, a favor del PP, respecto a 2019, y en la central se estaría jugando otro con Vox), pero también está preocupado por la posible desmovilización en los entornos de IU y, en particular, de Podemos, formación que ha traído hasta el inicio de la campaña electoral una crisis interna que para parte de su propio electorado podría haberse cerrado en falso, lo que añade un punto de incertidumbre.

Por eso Barbón hace una apelación constante a la participación, advirtiendo a propios y afines de que no acudir a las urnas el próximo domingo podría resultar en una combinación en la que «la extrema derecha» estuviese en disposición de dar la llave del Gobierno al PP, perto también de condicionar su acción.

Por otra parte, la proximidad de las elecciones nacionales -tanto Pedro Sánchez por el PSOE como Alberto Núñez Feijóo por el PP están ya claramente en precampaña- puede influir en la marcha de las elecciones autonómicas. La presencia de ministros socialistas en Asturias está siendo claramente superior en esta campaña que en otras anteriores, y cabe decir lo mismo sobre dirigentes nacionales del PP -ayer mismo estuvo Juan Bravo, que tiene muchas opciones de ministrable, de Hacienda o de Economía, con Feijóo, si este llega a formar gobierno-. Y esto puede polarizar el voto, en detrimento de otras formaciones.

En el caso de Foro, su candidato a la Presidencia, Adrián Pumares, repite una y otra vez que el suyo es el único partido que mira por los intereses de Asturias sin atender a «los jefes de Madrid» de PSOE y PP. Ciudadanos, por su parte, trata de hacer una campaña centrada en las clases medias y sus necesidades, pero las encuestas hablan de que apenas retendría entre 1,3 y 3,1 puntos de los 14,1 que tuvo en las últimas elecciones.

Y es precisamente ese ámbito el que puede dar cierto aire a las aspiraciones de Diego Canga. Según la encuesta de GAD3, casi la mitad de los antiguos votantes de Ciudadanos (un 45% de ellos) afirman que no votarán, o que lo harán en blanco, o que no se quieren definir). Y un 45% de los votos de Ciudadanos en 2019 serían 33.422 sufragios. Casi los mismos que supusieron entonces dos diputados para IU u otros dos para Foro. A modo de indicio, el otro 55% de los votantes de Ciudadanos ya se habrían decidido. Apenas el 16% se quedaría en la formación naranja, mientras que el 21% se iría al PP y el 11%, al PSOE, con un 4% para Foro y un 3% para Vox.

Por ello, el entorno socialista trata de consolidar la intención de ejercer el voto entre el electorado ya no solo del PSOE, sino del entorno de la izquierda, mientras que el PP trata de atraer los indecisos hacia sus postulados, además de que ambos, tal vez con más insistencia en los últimos meses por parte del PP, intentan fomentar la participación de los asturianos de la emigración con derecho a voto, que son según el último censo 123.201 posibles votantes. En 2019, de un total de 2.895 votos en las autonómicas sobre un total de 117.880 electores censados, el PSOE recibió 953 sufragios; Podemos, 449; Ciudadanos, 407; PP, 388; Vox, 266; Izquierda Unida, 141 y Foro, 77. Aún hay partido en la última semana de campaña.