La tensión entre el centro derecha evidencia su batalla interna por el voto conservador

Barbón fue, de este modo, objeto de todos los dardos, tanto de la derecha como de la izquierda, si bien no menor fue la tensión que se palpó entre las formaciones del centro derecha, donde los candidatos de Ciudadanos y Foro no dudaron en atacar al cabeza de lista del PP, que también entró al trapo en esta particular lucha por el voto conservador. Diego Canga contó, eso sí, con el apoyo de la candidata de Vox.

El líder socialista apeló al miedo contra la extrema derecha, pero fue prácticamente el único que dirigió el tiro hacia Vox. Los cabezas de lista de Podemos e IU-Convocatoria por Asturias, Ovidio Zapico y Covadonga Tomé, insistieron en que lo que Asturias se juega el 28M es la pluralidad del próximo gobierno y que el objetivo debe ser avanzar hacia un modelo como el que existe a nivel nacional. También la candidata de Vox, Carolina López, abrió la puerta a pactar con quienes estén dispuestos a acabar con las políticas de la izquierda, con la mirada puesta en el PP. Sin embargo, ni Barbón ni Canga quisieron coger los respectivos guantes, al menos por el momento.

A partir de ahí, y aunque el debate no fue especialmente bronco, sí se vivieron momentos tensos. Barbón trató durante todo el tiempo de presentar a su principal oponente, al que viene atacando desde su nombramiento por no residir en Asturias desde hace décadas, como una persona que no conoce la realidad de Asturias. «Algún candidato viene de fuera y no sabe que la ley del Reto Demográfico ya fue aprobada», apostilló el presidente asturiano cuando Canga le reprochó que no hubiera sido capaz de sacar esta norma adelante. La realidad es que la ley fue aprobada por el Consejo de Gobienro y elevada a la Junta, pero su tramitación no comenzó, por lo que decaerá con la disolución del Parlamento regional.

Diego Canga comentó también el compromiso del PP para que el lobo deje de ser especie protegida y, aunque vinculó la medida a la llegada de Alberto Núñez Feijóo a la Moncloa, Barbón obvió ese matiz y, en un nuevo intento de desprestigiarle, aclaró que «ningún candidato autonomico» puede sacar al lobo del Lespre. «Qué más quisiera yo», dijo. La jugada no le salió del todo bien al líder socialista. Su comentario fue rápidamente rebatido tanto por López, que le recordó que para eso tiene en Madrid «a su colega Sánchez», como por Adrián Pumares, de Foro, quien entendió que estando la FSA en contra de esta medida, el PSOE «bien podría haber elegido a otro senador y no precisamente a Fernando Lastra» para defenderla en las Cortes.

El candidato popular también afeó a Barbón que, durante su mandato, hubieran crecido un 62% las listas de espera. Éste se excusó en la pandemia y sacó pecho sobre la buena gestión de la misma, aprovechando para volver a cargar contra el cabeza de lista del PP. «Quizá no lo sabe porque estaba en Bélgica, pero nos reconoció la buena gestión de la pandemia gente de todo el mundo porque no dejamos a nadie atrás. Usted en ningún momento me llamó, pero no me sorprende porque tampoco me llamó cuando los incendios», apostilló. «No le conocía, ¿pretendía que le llamaran todos los ciudadanos de Europa?», se sorprendió Canga, quien quiso saber también si, cuando el presidente autonómico dice que «no ha dejado a nadie atrás, incluye a las personas que fallecieron esperando la ayuda a la dependencia».

Otro de los puntos de fricción se generó a raíz del debate sobre la reforma del Estatuto de Autonomía. Carolina López instó a celebrar una consulta para saber cuántos asturianos están o no a favor de la oficialidad y negó que existan llinguas, sino muchos bables, tantos como concejos, «que se los van a cargar». Los candidatos defendieron las respectivas posturas de sus partidos en torno a la oficialidad y Canga aprovechó para afear a Foro que «presuma de asturianía», pero únicamente presente candidatos locales en 26 concejos. «¿Es asturiano a tiempo parcial?», apostilló Canga a Pumares, quien le replicó que los candidatos populares «no viven en los concejos» a los que representan. «El PP se presenta en 78 concejos, dejando fuera a los compañeros de partido y metiendo a tránsfugas», se apresuró a añadir el candidato de Ciudadanos, Manuel Iñarra.

El momento más tenso, en cualquier caso, lo forzó Barbón cuando preguntó a todos los candidatos, con la mirada puesta en Diego Canga, si iban a permanecer en la Junta, ganen o pierdan, los cuatro años de legislatura. Canga insistió en el mensaje que lanzó esta semana el mitin central de la campaña, comprometiéndose a quedarse en Asturias, pero evitando en todo momento referirse explícitamente a los cuatro años. Barbón le interrumpió para exigirle más precisión sobre el asunto en varias ocasiones y Canga se sintió violentado. «Qué parte de la frase 'me voy a quedar en Asturias' no ha entendido. Se lo digo por tercera vez, le agradecería que no me interrumpiera», resopló Canga, quien en su minuto de gloria se resarció instando al electorado a elegir entre un «vividor de la política» y una persona que «ha dejado su trabajo para ponerse al servicio de Asturias.