Consejos para organizar la nevera y no desperdiciar comida

Organizar la nevera es la gran asignatura pendiente de los hogares. Hacerlo bien «servirá para hacer una gestión más óptima y eficiente de la comida» y, por tanto, reducirá los desperdicios. Así lo ve Helena Calvo, responsable de sensibilización sobre el desperdicio de alimentos en Too Good To Go. Ellos aportan estos consejos para organizar mejor el frigorífico.

1.TEMPERATURA: Se aconseja poner el frigorífico a una temperatura máxima de 5 grados centígrados para garantizar la correcta conservación y frescura de los alimentos contenidos. Ponerlo unos grados por encima podría estropear la comida mucho antes.

2. CADA ESTANTE TIENE SU FUNCIÓN: La mayoría de ocasiones se coloca la comida donde hay un hueco libre sin tener en cuenta que la nevera está diseñada para que cada producto tenga su lugar. Normalmente, la puerta es la parte menos fría, por lo que aquí se deben colocar bebidas, mermeladas, mantequillas, salsas y huevos.

Las frutas y verduras irán en los cajones, puesto que estos mantienen la humedad y evitan que un frío excesivo las eche a perder.

El estante inferior es, en la mayoría de neveras, la zona más fría y se reserva para los productos más perecederos que necesitan un extra de frescor, como la carne y el pescado.

Por contra, en los estantes superiores van a ocupar su lugar aquellos productos que tampoco necesitan un frío excesivo como son los yogures, embutidos, platos cocinados, entre otros. Ojo, que algunas neveras pueden intercambiar los espacios más y menos fríos. Un truco para identificarlos es tener en cuanta dónde se encuentra el congelador, pues siempre estará más cerca de la zona más fresca de la nevera.

3. EL CONGELADOR: La temperatura ideal es de -18ºC y en él guardaremos carne o pescado que no vayamos a consumir de inmediato, los productos congelados comprados en el supermercado y los túppers con la comida que nos haya sobrado o hayamos preparado para días posteriores. En este caso, lo guardaremos en diferentes recipientes, en porciones individuales o raciones mayores según las necesidades, y aprovecharemos para ponerle una etiqueta con la fecha de congelación.

4.SIEMPRE DELANTE: Ya sea en el frigorífico o en el congelador siempre tenemos que colocar delante y bien a la vista todo aquello que esté a punto de vencer o que lleve más tiempo esperando para ser consumido. De esta manera, los alimentos más antiguos quedarán visibles para darles salida antes que los que acaban de entrar.

5. NO ABRIR EN EXCESO LA NEVERA: Abrir y cerrar constantemente la nevera somete a la comida a constantes cambios de temperatura y la podemos llegar a deteriorar.

6. MANTENIMIENTO: Es importante no sobrecargar demasiado la nevera para que así esta pueda funcionar con normalidad y los alimentos siempre estén a la temperatura adecuada. Además, conviene limpiar e higienizar periódicamente el frigorífico, ya que la suciedad puede puede dañar la comida y ocasionar problemas de salud.