¿Quieres despedir a tu mascota? Puedes hacerlo en el nuevo canal de EL COMERCIO

El presidente de la comisión electoral del Grupo dimite por «presiones»

Luis Roza afirma que el comportamiento con él de la junta directiva ha sido «patético y lamentable» y que «están contra las cuerdas» por el Centro

Andrés Presedo

Sábado, 19 de diciembre 2015, 00:25

«Hace cuatro años fui elegido por los socios del Grupo a propuesta del señor Tamargo. Ahora he renunciado al cargo porque me siento presionado por su junta directiva. El club lo manejan entre dos, incluida la comisión electoral. No puedo admitirlo y me voy». Así se manifestaba ayer a EL COMERCIO el, hasta ahora, presidente de la comisión electoral del Real Grupo de Cultura Covadonga, Luis Roza. El letrado asegura irse «indignado», después de lo que califica como un «espectáculo lamentable y patético» del que, a su entender, ha sido víctima la última semana de manos de la junta directiva grupista, que «me ha ninguneado como persona y como profesional».

Publicidad

El origen de estas diferencias que han tenido como consecuencia su dimisión como presidente de la comisión electoral grupista, se remonta al pasado lunes. Fue entonces cuando un socio del Grupo Covadonga presentó un escrito por Registro para que se aclarara si los exsocios del Centro Asturiano podrán, o no, participar en las próximas elecciones grupistas. Luis Roza, presidente de la comisión competente para decidir sobre esos asuntos, se enteró de la existencia del escrito por este periódico y, durante cuatro días, inútiles fueron sus intentos ante el director general del Grupo para que se lo entregase de manera oficial. «Está en manos de los servicios jurídicos», asegura que le decía el citado responsable de la entidad.

«Una afrenta a mi persona»

Anteayer, a las siete de la tarde, acompañado por un burofax, finalmente le fue entregado el escrito citado cuando, por otra parte, ya obraba en su poder al haberle sido facilitado, por otra vía, por el socio firmante. Consecuencia, Luis Roza se negó a recibir el burofax «que seguro que no contiene para mí una felicitación navideña», dijo ayer irónicamente, y presentó su dimisión por escrito. «La directiva no lleva las cosas bien. No se pueden arrogar las competencias de la comisión electoral. Me tengo que enterar por el periódico de la existencia de un escrito dirigido a mi persona y en un asunto de mi plena competencia. Es lamentable. La junta directiva se arroga todas las funciones, incluso las de esta comisión», afirmó Luis Roza.

El letrado es consciente de que el asunto a tratar, relativo al posible derecho a votar de los ex socios del Centro Asturiano de La Habana, es muy delicado, «pero es que no nos han dejado ni estudiarlo. Incluso podíamos solicitar alguna consulta externa y pronunciarnos o no, ya se vería, pero tratarnos como subnormales es lamentable y patético. Yo lo considero como una afrenta a mi persona y me marcho para evitar problemas personales y, también, que utilicen toda la 'maquinaria' del Grupo contra mí».

Luis Roza, ya como socio, tiene claro que «la directiva del Grupo está contra las cuerdas por todas las sentencias perdidas del Centro Asturiano» y «parece que no quieren que entre gente nueva». Ahora, incluso por consejo familiar, y con reconocida «profunda tristeza», el letrado ha decidido apartarse de todo el proceso para no verse salpicado.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

1 año por solo 16€

Publicidad