EMTUSA defiende que tiene uno de los bonos de transporte más baratos

EMTUSA no ha conseguido sacar adelante su propuesta para subir las tarifas. Era pasar de 1,25 a 1,50 euros el billete sencillo; de 0,70 a 0,75 los viajes que se cargan en los bonos de transporte; de 37 a 39,70 el bono mensual; de 174 a 186,50 el semestral, y de 290 a 310,80 el anual. La empresa reivindica esta subida para tratar de mejorar las cuentas y asegura que es de las más baratas del país.

Ha elaborado, de hecho, una comparativa del precio del bono de transporte en otras ciudades de similares características. El resultado es que entre 17 localidades, solo en Santander es más barato, con 0,66 euros por viaje. Con el mismo precio que Gijón está Pamplona, mientras Córdoba, con 0,72 euros, está muy cerca. El resto de los precios del viaje con bono de transporte son más elevados. En 0,75 euros (el precio que quiere poner Gijón) están Valladolid, La Coruña y León. Con un precio de 0,76 se sitúan Zaragoza y Sevilla, si bien esta última permite transbordos en la primera hora tras validar el billete, mientras Gijón los permite en los primeros 45 minutos. Las demás ciudades tienen precios bastante más caros: Málaga, 0,84 euros por viaje; Valencia y Las Palmas, 0,85; Vigo, 0,89; Oviedo, 0,90; San Sebastián, 0,96; Bilbao, 0,99, y Palma de Mallorca, 1,50.

Los menores de 17 años pueden viajar gratis «en un esfuerzo por acercar el autobús a los jóvenes», indicó el concejal de Medio Ambiente y Movilidad, Aurelio Martín. Pero esa política se enfrenta con la fuerte repercusión que ha tenido la covid en la empresa. «Hubo ayudas de la Administración central, pero no sabemos si seguirán», añadió.

Poco a poco se van recuperando los viajeros perdidos con la crisis sanitaria y en septiembre pasado ya se consiguió el 75% de usos que había antes de la pandemia, un dato que sube al 80% de lunes a viernes. «Pero hay muchas dudas de que podamos acercarnos al cien por cien en 2022. Todo esto provoca un descuadre en la cuenta de resultados de la empresa», explicó Martín, quien defendió la subida de las tarifas como una manera de «atemperar las pérdidas». En cuanto al motivo por el que los ciudadanos no regresan al transporte público como lo hacían antes de marzo de 2020, el edil cree que «debe de seguir existiendo la componente sicológica del miedo».

Pero ya se han terminado las restricciones y lo que ocurra este mes será crucial para tener una idea de cómo será la futura ocupación en EMTUSA. Regresó el transporte escolar, las universidades funcionan al cien por cien, los espectáculos culturales y deportivos no tienen restricciones... Es una vuelta a la normalidad con la que se verá si ocurre lo mismo con el autobús.

En Gijón, el 82% de los clientes utiliza algún tipo de bono y solo el 18% utiliza el billete sencillo. Los cálculos de la empresa indican que si una persona utilizara el bono de transporte todos los días del año, el incremento de precio propuesto solo le supondría 18 euros. Estas subidas permitirían a EMTUSA recaudar un millón de euros más, mientras el déficit con el que tiene previsto cerrar este ejercicio asciende a 3,3 millones de euros.

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