Emulsa prevé implantar un sistema de pago por generación de basura no reciclada

La Empresa Municipal de Servicios de Medio Ambiente Urbano de Gijón (Emulsa) lidera el proyecto europeo Winpol, que pretende, entre otras cosas, difundir políticas y buenas prácticas relacionada con la gestión de la basura, minimizando de esta forma los residuos en las ciudades.

Son varias las alternativas que se estudian. Hay países que obligan a identificar los propietarios de las bolsas de basura o a pagar según la cantidad que se arroje a los contenedores, entre otros sistemas. Desde Emulsa se reconoce que «la tendencia en Europa es el pago por generación, es decir, si reciclas más, pagas menos».

Esta es una de las formas de control previstas, ya que todos los ciudadanos pagan lo mismo con independencia de su implicación con el reciclaje. Por eso, Emulsa estudia la posibilidad de implementar una experiencia piloto de pago por generación de basura bruta, es decir, la mezclada, pero también debe decidir dónde aplicarlo, aunque su habitual campo de experimentación es el Polígono de Pumarín, ya que es una zona de Gijón fácil de controlar. Emulsa aún lo tiene en estudio pero es consciente de que «es por donde se debe ir, porque las penalizaciones son cada vez más importantes».

Pero esta idea se enfrenta a importantes retos técnicos, como pueden ser cómo controlar quién utiliza los contenedores de reciclaje, cuántas veces lo hace a la semana y la cantidad de basura que echa a ellos, ya que, por ejemplo, no es lo mismo abrir tres veces el contenedor para echar un yogur cada vez a hacerlo solo una vez con una gran bolsa de material reciclado. «Es muy complejo, pero está claro que lo hay que implantar a futuro», advierten desde la empresa.

Emulsa pretende dar las máximas facilidades para que los gijoneses aumenten su tasa de reciclaje. No solo no se ha cumplido el objetivo del 50% marcado por Europa, sino que ahora hay uno nuevo que llega al 55%. Además, hay que tener en cuenta que las costumbres de los ciudadanos cambian con los tiempos. Así, por ejemplo, con la pandemia aumentó de manera muy importante el comercio electrónico y con él una subida espectacular del cartón. Eso hace, además, que Emulsa tenga que mejorar su gestión, como incrementar la frecuencia de los camiones que vacían los contenedores de reciclaje. «Tenemos que mejorar la eficacia y la eficiencia, es decir, hacerlo mejor y con menos gastos», explican en la empresa.

Emulsa aún no tiene los datos definitivos de la basura recogida en 2020, ya que faltan por recabar los relativos a los puntos limpios, muebles, cartón comercial y vidrio hostelero. Sí se disponen ya de los contenedores ubicados en las calles y el total recogido es de 104.610.375 kilos, mientras que la cantidad reciclada ascendió a 23.181.945 kilos. El mayor incremento registrado el año pasado con respecto a 2019 correspondió a la materia organiza, que con 3.453.380 kilos supuso un incremento del 46,4%. También subió mucho la recogida de envases, con un incremento del 11,4% y 5.500.210 kilos recogidos. El vidrio también subió un 1,8%, con 5.555.740 kilos. Los descensos registrados fueron en cuanto a la fracción resto, es decir, la basura mezclada, con una bajada del 8,1% y 81.428.430 kilos, y el papel y cartón, con un descenso del 2,6% y un total recolectado de 8.672.615 kilos.

Los meses de abril y mayo del año pasado tuvieron un importante impacto en la recogida de basura, pero, sorprendentemente, no en todos los casos a la baja. Así, en cuanto a los envases hubo un incremento en ambos meses, del 1,5% y del 8,1%, respectivamente.

También aumentó en abril la recogida de vidrio un 1,1%. Pero lo que más llama la atención es la recogida de basura orgánica, con una subida del 63,2% en abril y del 22,3% en mayo. No obstante, el mayor incremento en este apartado correspondió al mes de marzo, llegando al 123,5%.

El descenso de la recogida de cartón sí fue impactante, alcanzando el 27,1% en abril y el 19,6% en mayo, sin duda influido por la ralentización de la actividad comercial. En el mes de mayo también bajó un 14,8% la recogida de vidrio.

El de abril fue el mes que menos basura se recogió en Gijón, con 7.518.230 kilos, mientras que en agosto se alcanzó la cifra más alta, con 9.505.890 kilos. En el resto de los meses del año en ningún momento se bajó de los ocho millones de kilos. En cuanto al reciclaje, en diciembre se recogieron en las calles de la ciudad 2.358.870 kilos, mientras que en abril solo fueron 1.673.250 kilos, de un total de 23.181.945.