Un esfuerzo necesario

Una ciudad nunca termina de crecer. Y, a veces, eso requiere más esfuerzos para los ciudadanos de los que a estos les gustarían. Ocurrió, también, hace 25 años, cuando la reordenación del conjunto de la plaza de Europa y la construcción del aparcamiento subterráneo colapsó la ciudad. Lo que hacía meses había sido definido como «compleja entelequia» muy alejada de la realidad se hacía ahora realidad, y eso, decíamos, «requerirá el esfuerzo de todos». «Hace escasos días ya tuvieron lugar cambios en la plaza de Europa, como consecuencia de las primeras obras del proyecto, centradas en el área de los Jardines de Alvargonzález, donde están siendo conservados todos los árboles que dan cobijo al retorno de los estorninos». Ya había anunciado Nanclares, el arquitecto, y no en vano, que se procuraría que las obras «causaran el menor impacto posible sobre el equilibrio ecológico de la zona sobre la que se iba a actuar».

Sobre lo que no había remedio era en el tráfico rodado, que se vería afectado sí o sí. El principal cambio vendría del cambio del sentido de circulación «en el tramo de la avenida de la Costa que la une con la Puerta de la Villa desde la intersección con la calle de Mieres», para facilitar el acceso al ambulatorio. Los vehículos que circulasen en ese sentido, «desde la zona del paseo de Begoña o procedentes de la avenida de los Hermanos Felgueroso, podran optar por girar hacia la plaza del Seis de Agosto, a lo largo de la calle de José las Clotas, o continuar hacia el paseo del Humedal. En ese punto deberán girar a la izquierda, por la calle de Prendes Pando, junto al Palacio de Justicia, si los usuarios pretenden tomar la avenida de la Constitución». Finalmente, para salir de Puerta de la Villa hacia el este de la ciudad «se deberá circular por la avenida de Schultz para tomar después la calle de Manuel Llaneza». Y todo esto continuaría así, al menos, hasta el verano de 1998, «excepción hecha del área del parque infantil, bajo el cual será construido el aparcamiento subterráneo». Las obras costarían 267,2 más 391,6 millones (entre remodelación y aparcamiento) y, ya lo ven, el esfuerzo ímprobo de los ciudadanos.