¿Quieres despedir a tu mascota? Puedes hacerlo en el nuevo canal de EL COMERCIO
Así lo contó EL COMERCIO.
1898. Hace 125 años.

¡Fuego a bordo!

La declaración de un incendio en un vapor en el antepuerto generó inquietud, llegando a personarse el alcalde en el lugar del suceso

No hubo cosa más comentada en el Gijón de hace ahora 125 años. La circunstancia lo merecía: el día anterior a que EL COMERCIO lo ... contase, es decir, el 25 de enero de 1898, a eso de las nueve y media de la mañana, se declaró un incendio a bordo del vapor 'Piles', propiedad de los señores Pedrós y Compañía, «surto en el antepuerto desde horas antes, que había llegado de las rías de Galicia, con carga general, compuesta, en su mayor parte, de tamboretes de sardina salada y tabletas en fajos». Parecía que el fuego había sido causado «en el departamento de la caldereta contiguo a la escotilla de popa», por algunas brasas que se desprendieron de la misma y acabaron por abrasar varias maderas.

Publicidad

Se encontraba, en aquellos momentos, la tripulación maniobrando para atracar en el muelle de Santa Catalina, lo que, evidentemente, no pudo ser. Todo se paralizó. El comandante de Marina ordenó detener las operaciones para el atraque y, acompañado del ayudante y del práctico mayor, movió Roma con Santiago para apagar el incendio. Avisó al alcalde; este hizo lo propio con la guardia urbana y esta, a su vez, con la brigada de bomberos, «los cuales acudieron con el material de servicios, que prepararon para hacer funcionar enseguida». No iba a ser fácil la cosa, aunque no sabemos si tan poco como lo había sido lidiar con la burocracia. Hubo que enchufar una manguera en la calle de la Artillería, «donde se hallaba situada la boca de incendios más inmediata», y enviar una bomba -que facilitó el vapor 'Montañés'- para acercarse al costado de babor del buque.

Por suerte, el embrollo no tardó en arreglarse. A la una de la tarde, según contó EL COMERCIO, el fuego quedó extinguido, y los desperfectos materiales,« tanto del buque como de la carga», se descubrieron de poca consideración. Fue gracias a la colaboración de no pocas personas... y barcos: los remolcadores 'Rafael' y 'Musel', por ejemplo; algunos vapores de pesca, que no tuvieron que utilizarse finalmente pero se prestaron voluntarios; el propio capitán del 'Piles', Valentín Gómez, las autoridades de Marina y más. Un buen trabajo en equipo.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

1 año por solo 16€

Publicidad