Un informe de 2021 certificó que El Bibio «reúne las condiciones de seguridad» para espectáculos

La redacción del segundo aún no está concluida -se prevé que pueda estarlo en algo más de una semana-, pero el informe preliminar ya apunta algunas deficiencias estructurales. En concreto, hundimientos en la zona de asientos correspondientes al tendido bajo. El equipo de gobierno ve necesario llevar a cabo trabajos de adecuación en el coso y, por tanto, su cierre temporal. «Mientras yo sea alcaldesa no voy a incurrir en ningún riesgo para las personas», argumentó el pasado lunes la alcaldesa, Ana González.

La aparente contradicción en el resultado de las dos inspecciones resulta «extremadamente chocante» al concejal de Foro Jesús Martínez Salvador que, al igual que el empresario taurino Carlos Zúñiga, se pregunta si «el año pasado se puso en riesgo la seguridad de los asistentes» a la Feria de Begoña.

Para aclarar la situación en que se encuentra la plaza, Foro solicitó ayer la comparecencia del concejal Olmo Ron ante la Comisión de Participación Ciudadana, Obras y Distritos. Quieren que informe «de todo lo concerniente al estado de El Bibio y las actuaciones llevadas a cabo desde su concejalía».

En el informe del mes de julio de 2021, se hacía referencia a que la plaza de toros municipal no había modificado las condiciones interiores de seguridad con que contaba desde la última rehabilitación, la que concluyó en 1999 y supuso una inversión cercana a los 330 millones de las antiguas pesetas, pero sí que desde entonces se había llevado a cabo «el mantenimiento sistemático de sus instalaciones».

También hacía referencia a las mejoras realizadas «para reducir el riesgo de caída», especialmente en la zona de vomitorios, palcos y andanadas. Para ello se había procedido a la instalación de protecciones adicionales.

El dictamen del servicio de Urbanismo también ponía negro sobre blanco una serie de condiciones para la celebración de espectáculos taurinos en la plaza. Entre ellas, que el anillo de paso sol-sombra en la planta baja en el que están situadas las salidas de la plaza estuvieran libres de obstáculos y que «bajo ninguna circunstancia» se bloquearan o cerraran las puertas de evacuación al exterior.