«Queremos realidades, no promesas. Estamos hartos de que nos ninguneen»

«Estamos hartos de que nos ninguneen. Dicen que por fin van a hacer un consultorio, pero no nos creemos nada. Queremos realidades, no promesas». Con estas palabras reflejó ayer el presidente de los vecinos de Nuevo Roces, Miguel Bernardo, el sentir general del barrio. Lo hizo ante las más de 200 personas que se dieron cita en la plaza de Granda para protestar por la situación que viven, en cuanto a servicios, tanto en Nuevo Roces como en La Camocha.

Los primeros defienden que existe una diferencia de trato respecto a otras zonas de la ciudad y reclaman la habilitación de un colegio y un consultorio médico. «Los niños deberían poder ir andando al colegio. Tenemos derecho a salir de casa y no tener que coger el coche para ir al médico», consideró Bernardo, quien cargó duramente contra la «inacción» política al respecto. «Queremos políticos que sirvan para algo, no parásitos», dijo quien agradece la mediación de la alcaldesa, Ana González, a la hora de lograr el compromiso del consultorio por parte del Principado, aunque se muestra reticente a que termine materializándose en los plazos anunciados. «Le damos un voto de confianza a la alcaldesa y al nuevo equipo de gobierno, pero estamos hartos de promesas», afirmó, precavido.

Por su parte, en La Camocha se quejan de una «precariedad total» en su centro de salud provocada por la falta de médicos. «No se dan cuenta de que un 43% de los vecinos son mayores y precisan de una atención continuada. No puede ser que vayan al médico y les digan que vuelvan la semana siguiente», expresó su presidente, Herminio Torre, quien incitó a los políticos presentes en la concentración a «ponerse las pilas» y ejercer presión en las administraciones para una pronta situación de esta problemática.

Con la acción llevada a cabo ayer, que supuso el corte del tráfico en la zona durante algo más de media hora, los vecinos de Nuevo Roces y La Camocha dieron un paso más en sus reivindicaciones, esta vez de forma conjunta. «Es la vía a seguir a partir de ahora», señalaron los presidentes vecinales.