Transportes culmina las expropiaciones a la espera de definir el nuevo vial de Jove

El pasado enero, cuando oficialmente la «complejidad técnica» del proyecto tan solo estaba dilatando los plazos para adjudicar el contrato pero aún no se hablaba de la posibilidad de suspensión, los propietarios de terrenos que aún no habían sido adquiridos por el Estado para la ejecución de esta obra fueron citados para proceder al levantamiento de las actas de ocupación. Y la mayoría de las expropiaciones ya se han hecho efectivas, con la correspondiente compensación económica. No obstante, aún hay suelos pendientes de completar este trámite por problemas para identificar o localizar a sus propietarios. Es el caso de 29.000 metros cuadrados en dos parcelas colindantes con el camín del Regatu, en Jove, que necesitan ser ocupados durante la ejecución de la obra, si bien posteriormente serían devueltos.

Los suelos forman parte del antiguo proyecto residencial de Ecojove «y según certificaciones de la Dirección General del Catastro corresponden a Áreas Residenciales Concertadas», indica la Demarcación de Carreteras en una notificación sobre la adquisición de este suelo «por el procedimiento de expropiación forzosa». El problema, añade, es que esta sociedad, surgida en su momento como fruto de la unión de varias constructoras, consta como «extinguida». Por eso, ayer recurrió al Boletín Oficial del Principado de Asturias (BOPA) para informar de la apertura de un plazo de diez días para que su propietario «acredite su consideración de interesado en el procedimiento».

Durante su visita a Gijón la semana pasada con motivo de la reunión del consejo de administración de Gijón al Norte, el secretario de Estado de Transportes, José Antonio Santano, destacó la «ventaja» que supone para poder trabajar en diferentes alternativas el hecho de que los terrenos ya hayan sido expropiados y pertenezcan al ministerio. «Eso facilita mucho las cosas», indicó el alto cargo.

Fue ahí cuando Santano anunció que, tras desistir del soterramiento completo y después de haber hablado en un principio de un vial íntegramente en superficie, su departamento estudia opciones intermedias. «Vamos a trabajar en opciones que puedan tener partes en superficie, pero otras semisoterradas, en trinchera o incluso con la posibilidad de un falso túnel con una losa», indicó. Y se comprometió a presentar después del verano diferentes opciones para su análisis municipal y así poder «avanzar juntos» en la definición de la solución más adecuada.