«A los niños hay que hablarles de lo que pasó en París»

«Hoy ha vuelto a pasar... Hoy te vuelves a enfrentar a algo que ni yo mismo puedo entender. Te miro mientras miras las imágenes con las que nos bombardean, y la primera decisión a la que me enfrento no es fácil, y solo es la primera. ¿Te aíslo, te oculto el dolor y la sangre, o te dejo que te enfrentes a la realidad que tarde o temprano te llegará?». Así empieza el documento que el Grupo de Intervención Psicológica en Emergencias y Catástrofes de Asturias ha elaborado para intentar ayudar a explicar a los niños lo ocurrido en los últimos atentados terroristas de París.

Porque los más pequeños y los adolescentes no están ajenos al negro 13N que quedará en las mentes de todos, como han quedado el 11S de Nueva York o el 14M de Madrid. «Saben que ha pasado algo y que ha sido algo muy fuerte. Intentar protegerles y querer aislarles es un error porque finalmente se acaban enterando y lo procesan de forma más confusa». Lo asegura Angélica Rodríguez, una de las integrantes de este grupo del Colegio de Psicólogos, que ha remitido a centros escolares, institutos y asociaciones de madres y padres de alumnos las recomendaciones sobre cómo abordar el espinoso y delicado asunto de los atentados con los más pequeños.

«A los niños, cada uno a su nivel, hay que hablarles de lo que pasó en París. Hay que darles la posibilidad de que se expresen y hay que escucharles», dice. Angélica cuenta a modo de ejemplo lo ocurrido con un pequeño de seis años, sobrino de uno de los técnicos sanitarios de ambulancias con los que ella trabaja, al que durante el fin de semana sus abuelos y padres se afanaron para que no viera imágenes ni escuchara nada sobre lo que estaba pasando en la ciudad gala. «El lunes vino del colegio diciendo que habían hecho un minuto de silencio con sus compañeros de clase porque 'unos bandidos muy malos de París estaban cerca del cole y todos nos callamos un rato para que no nos descubrieran'». Al final «acaban construyendo una idea más confusa y, posiblemente, más dañina».

En buena parte de los colegios asturianos se celebró el lunes un minuto de silencio por los luctuosos sucesos de París. Uno de ellos fue el San Vicente de Paul, de Gijón, donde, según explicó Óscar Palomero, jefe de estudios de Secundaria, «realizamos varias actividades. Desde elaborar y rezar una oración hasta una pequeña concentración en la que participaron todos los niveles, a excepción de los de infantil». Pero, con los más pequeños, «abordamos el tema en la clase, con sus maestras que son las que cuentan con las herramientas adecuadas».

Angélica Rodríguez da algunos consejos más que pueden ayudar aliviar la angustia de muchas familias cuando sus hijos le preguntan por qué los terroristas matan y se matan. «No siempre tenemos que tener la respuesta. Hay que ser honestos y responder algo como 'yo eso no te lo puedo responder porque tampoco lo entiendo'».