El vídeo de marras

La imagen de una niña arrodillada, con una diadema recogiéndole el pelo, vistiendo un chándal –horroroso, por cierto– y cepillo en mano borrando parte del ... césped de El Molinón, no parece la más adecuada para intentar dar un mensaje de igualdad. Por mucho símbolo de Venus que la pequeña terminara pintando sobre el campo, su imagen fregando cual Cenicienta castigada no ayuda. El vídeo publicado en redes sociales por el Sporting, con el que pretendía sumarse de manera pública a los actos conmemorativos por el Día de la Mujer, fue, cuanto menos, desafortunado. En lugar de aportar un granito de arena, echó tierra encima. Y mucha. Puede parecer una anécdota más dentro de la larga lista de situaciones incómodas que las mujeres nos encontramos y soportamos a diario, y también es posible que muchos y muchas ni siquiera logren ver un sesgo machista en esas imágenes de la niña arrodillada. Pero lo hay. Son de agradecer las disculpas y el 'mea culpa' público realizado por el club rojiblanco al admitir a las pocas horas el error y que, como bien dice nuestro jefe de Deportes, José Ángel García, reconociera que había metido la pata hasta el fondo. El Sporting quizo marcar un tanto por la igualdad y acabó perdiendo por goleada y con una sucesión de tarjetas rojas. Y es que, aunque el Sporting, la Federación Española de Fútbol y muchísimas otras entidades no hayan caído aún del guindo, gran parte de la sociedad ya se ha dado cuenta de que las mujeres ya no queremos disculpas, ni piquitos, ni Rubiales en la vida. Quedó más que demostrado en las manifestaciones del viernes en Langreo y Gijón. ¡Qué orgullosa hubiese estado Anita Sirgo de ver a sus hijas y nietas tomar las calles con tanta naturalidad y alegría! Esas mismas hijas y nietas (esa niña sportinguista) lo que reclaman es igualdad real, y van a por ello. No quieren vídeos de futbolistas arrodilladas, sino menos brecha de género. Puede que en futuros Días de la Mujer el Sporting anuncie la equiparación salarial entre jugadores y jugadoras. Ese sí que sería un buen gesto por el 8M.