El alcalde dice que «la seguridad de La Ería es como en todo el mundo»

Tras las críticas de los tres partidos de la oposición, PSOE, Foro Oviedo e Izquierda Unida, por el anuncio de la prohibición de acceder a los conciertos de La Ería con bocadillos y botellas de agua, el alcalde, Agustín Iglesias Caunedo, salió en defensa de las reglas de seguridad que prevalecerán en el recinto. «Las medidas de seguridad son las mismas que se aplican en todas las partes del mundo cuando se accede a un concierto», defendió.

Además, recordó que se instalarán tres grifos con agua potable dentro del espacio de conciertos. «Habrá agua de Oviedo. Presumimos de que tenemos una de las mejores aguas y la podrá disfrutar gratuitamente en el recinto todos los asistentes a los conciertos», expresó.

Unas horas antes, la Asociación de Vigilantes de Seguridad Privada de Asturias (Avispa) calificó, en un comunicado, de «oportunismo político» que «denota una incultura y analfabetismo extremo» la propuesta de los grupos municipales de la oposición para que se permita el acceso con bebidas y bocadillos.

El coordinador general de Avispa, Jorge Cuesta, considera que tal exigencia «no es más que una insensatez» sin argumentos razonados fruto del desconocimiento «en materia de seguridad y protección de los bienes y personas, así como el de garantizar una correcta aplicación de la normativa vigente en cuanto a la celebración de eventos musicales». Aseguró que las actividades de «registro» superficial y «cacheo» están ampliamente amparadas en la legislación vigente.

Sin embargo, desde el Partido Socialista animan a los asistentes a llevar sus bocadillos de casa y sus botellas para rellenarlas en los grifos del recinto, «con agua que pagan, al igual que las carpas y los conciertos de La Ería».