Un Heraldo a caballo vitoreado por la afición del Cádiz

Cuando el Heraldo con su paje y su caballo, o lo que es lo mismo Hugo y Omar Alonso Soto y 'Bandolero', llegaron a la plaza de la Catedral se dieron cuenta de que este año no iba a ser como los anteriores. La afición del Cádiz llenaba la plaza dispuesta a disfrutar de la jornada independientemente del resultado del partido con el Oviedo. Llenaban la plaza de la Catedral y todo el casco antiguo, por lo que acompañaron al Heraldo a caballo en su recorrido y en su solicitud a las autoridades para celebrar el Martes de Campo. Entró en la plaza del Ayuntamiento con su paje y un pequeño séquito con hilanderas que recordaban al gremio de sastres y gigantes y cabezudos. El alcalde, Agustín Iglesias Caunedo, en el balcón consistorial, no dudó en dar el consentimiento que el Heraldo le pedía para dar por inaugurada la fiesta de la Balesquida.

Los gaditanos no dejaron de vitorear en ningún momento, casi ni cuando el público que abarrotaba la plaza del Ayuntamiento calló para escuchar al Heraldo pedir permiso y avanzar el comienzo de los días festivos. La Banda de Gaitas Ciudad de Oviedo interpretó 'Asturias patria querida'. La afición entonó el popular cántico e incluso se animó a bailar al ritmo marcado por los ovetenses.