Los empresarios de Oviedo confían en que la bajada de tasas «tenga impacto» en los sectores más castigados

Hosteleros, constructores y, en sentido amplio, empresarios de Oviedo bajo el paraguas de la Cámara de Comercio, valoran positivamente la rebaja en las tasas que gravan sus actividades de cara al próximo ejercicio pero lamentan que esta no haya sido mayor. Como adelantó este diario, la junta de gobierno local aprobó ayer el proyecto de ordenanza de precios y demás gravámenes en el que se contemplan bonificaciones a las terrazas de hostelería en un 25%, mismo porcentaje que las de obra y construcción mientras, que las de actividad se reduce en un 50%. «Toda ayuda es bienvenida en estos tiempo», coligieron los empresarios consultados ayer acerca de las medidas en materia fiscal lanzadas por el Consistorio para el próximo ejercicio.

En cuanto a la primera de las exenciones, desde la patronal hostelera Otea ponderan el esfuerzo pero lamentan que no alcance el 100% de la instalación de cenadores en espacio público. «Nos hubiera gustado que fuera del 100% pero entendemos que el Ayuntamiento tiene que cuadrar sus números», razonó David González Codón, presidente de la asociación en Oviedo, que valoró, asimismo, la línea de ayudas que se contemplan dentro del plan Oviedo Recover para financiar los gastos en prevención asumidos por las pymes de la ciudad, así como la subvención por cada trabajador que hayan sacado del ERTE. «El plan de rescate va a compensar. Una cosa por la otra», indicó.

Todo porque, en el sector, reina un cierto «desasosiego». «Todo suma; nos hubiera gustado que fueran más allá pero creemos que las ayudas están siendo importantes», medió. «Sabemos que el tema de ordenanzas y exenciones tiene un encaje legal complicado y agradecemos el esfuerzo siendo conscientes de que hay que ajustar todos los gastos que dependen de la administración si nos están mandando cerrar», sostuvo.

Desde la Cámara de Comercio de Oviedo, su presidente, José Manuel Ferreira, apuntaló el discurso de Codón a la espera de conocer en detalle el proyecto de la ordenanza. «Todo lo que sea una reducción de tributos en principio suena bien», explicó. «Sobre todo en sectores enormemente afectados por la crisis como la hostelería y el comercio».

«Hace falta saber si llegan a la cantidad suficiente para que tenga impacto adecuado, pero estamos viendo esfuerzos desde el municipalismo; ayuntamientos que se están tomando muy en serio esta situación», evidenció calificando la crisis de «tal envergadura» que «requiere medidas suficientes en cantidad» y «ágiles en la gestión», para que lleguen a los destinatarios antes de que la situación sea irreversible.

La patronal de la construcción CAC-Asprocón enunció el mismo mantra: «Toda rebaja en estos tiempos es bien recibida». Así lo indicó su presidente, Joel García, que valoró positivamente la noticia de que las licencias de obra vayan a contar con bonificación el próximo ejercicio.

«El sector venía con cierta inercia y ahora mismo la mantiene», se mostró optimista García apremiando a las administraciones a que liciten la obra pública presupuestada. «El Principado está sacándola adelante y estamos a la expectativa de cómo se desarrollan los acontecimientos en invierno», previó.

«En cuanto a la edificación, los edificios que están en construcción tienen visos de acabarse», sostuvo, lanzando un aviso a los consistorios como el de Oviedo. «Los ayuntamientos tienen que empezar a aprobar los presupuestos cuanto antes. Antes de enero», calculó para que toda la licitación de obra pública pueda tramitarse con la mayor prontitud. «Es fundamental para mantener puestos de trabajo y empleo», agregó.

El proyecto de ordenanzas de tributos que ha aprobado la Concejalía de Economía, que lidera el popular Javier Cuesta, comprende también rebajas en el IBI -en ambos tipos, el común y el de los grandes catastros-, así como la congelación de los precios públicos que pagan los vecinos por los servicios municipales.