Vacunas anticonceptivas contra el aumento de jabalíes

La Asociación Nacional de Animales con Derechos y Libertad (Anadel) y la Plataforma Ciudadana Pro Animales de Oviedo presentarán ante el Ayuntamiento un informe en contra de que en el municipio se comience a cazar jabalíes con arcos. Esta fue una de las propuestas que estudió el Principado de Asturias para acabar con la plaga de suidos en el núcleo urbano ovetense. Los animalistas consideran que además de «ser peligroso» para el ciudadano supone una «extrema crueldad» para el animal por el sufrimiento que puede causarle si el tiro es erróneo y no le causa la muerte inmediata.

Una de las medidas alternativas que proponen es combatir el aumento de la población de jabalíes a través de vacunas anticonceptivas, como así se realiza en Cataluña. «Este método supone un éxito del 100% de eficacia en todos los animales vacunados consiguiendo que dejen de nacer 400 jabalíes en un año», expusieron las asociaciones pro animales, a través de un comunicado.

Tanto desde la plataforma ciudadana como de Anadel explicaron que el informe que presentarán al Ayuntamiento recoge, además, otras medidas preventivas para evitar el acceso de los jabalíes a las zonas urbanas como la utilización de comedores forestales, contenedores cerrados y con sistema antivuelco en las comunidades de vecinos, la delimitación de zonas con recursos olfativos y vallados que «en Oviedo no se han llegado a utilizar», explicaron.

El informe que los animalistas presentarán al Ayuntamiento, en contra de la caza con arco de jabalíes, se basa en estudios realizados por cazadores y veterinarios donde demuestran, dicen, que «la caza indiscriminada lo único que hace es aumentar la población». Además, incidieron en los daños físicos contra los jabalíes. «Las posibilidades de que el disparo pueda resultar desviado de lo que en un principio se fija como lugar ideal, flecha al corazón y punto final, son casi infinitas, dejando al animal agonizando por tiempo indeterminado y malherido».

Las dos asociaciones defensora de los animales aseguraron que iniciarán todas las «acciones legales necesarias» para impedir su posible implantación. Entre sus argumentos, no solo encaja el sufrimiento animal sino también «el peligro para el ciudadano y el resto de la fauna de la zona pues el animal puede huir en estampida provocando situaciones de verdadero peligro», alegaron.

A día de hoy, el control de la población de jabalíes se realiza a través de batidas controladas por la guardería rural de la Consejería de Medio Ambiente. Son estas patrullas quienes se están encargando de controlar la presencia de los suidos en la ciudad pero sobre el plan de frenar la población de jabalíes a través de su caza con arcos, hay un absoluto mutismo.