Una lista liderada por Llamazares y que incluya a Argüelles, opción al alza en IU

Buena parte de las expectativas de la izquierda en Asturias ante las elecciones de 2019 están vinculadas al rumbo que emprenda IU. En concreto, de si las familias mayoritarias en su dirección son capaces de ponerse de acuerdo en una candidatura común o si impera el conflicto y la coalición llega rota a esa cita con las urnas. El objetivo es que cuaje esa primera posibilidad y, todavía con mucha tela que cortar, la opción de una lista de consenso encabezada por Gaspar Llamazares y en la que también esté presente Ramón Argüelles gana enteros a estas alturas.

Amplios sectores de IU entendieron ayer el discurso del coordinador en el que se mostraba favorable a acuerdos de la izquierda en Asturias, incluso a través de un gobierno de coalición, como un mensaje orientado a aglutinar posiciones dentro de las familias mayoritarias. Con matices, pero esa es una idea ampliamente compartida en el seno de la organización: desde una posición exigente de izquierdas, estar en los núcleos de poder desde los que tomar decisiones favorables a una mayoría de la ciudadanía. Como se hizo en el pasado, por ejemplo, dando pie a una medida como el salario social.

Internamente la 'fontanería' de IU está llevando a cabo una labor de engrase. Existe una coincidencia amplia en interpretar que Llamazares es la mejor baza electoral posible. Es verdad, eso sí, que algunas de sus decisiones, su participación en otro movimiento político, Actúa, generan rechazo en algunos sectores. Recelos que, no obstante, se confía en vencer a partir del objetivo común de cosechar el mejor resultado posible en las urnas.

En esa candidatura de consenso, son muchos los que en el seno de IU consideran que el coordinador debe estar en un puesto de salida. El máximo representante institucional, razonan quienes esgrimen esta tesis, debe tener cabida en la composición de una lista que represente a las distintas sensibilidades. Es verdad, eso sí, que también hay detractores que afean a Argüelles sus idas y venidas políticas, pero dejarlo fuera difícilmente trasladaría una imagen de unidad.