PSOE y Unidas Podemos exhiben ahora su unidad con una moratoria para los desahucios

No hay ninguna garantía de que no vayan a volver a producirse desencuentros, pero después de que Pedro Sánchez hiciera evidente al resto del Gobierno su malestar e incluso su cabreo por el episodio vivido la semana pasada a cuenta del anteproyecto de la ley de libertad sexual, la Moncloa corrió ayer a exhibir la supuesta reconciliación y capacidad de entendimiento entre la vicepresidenta Carmen Calvo y el vicepresidente social, Pablo Iglesias.

El Ejecutivo anunció de hecho, como gran paso en las relaciones entre el PSOE y Podemos, la inclusión de una medida para frenar los deshaucios por impago de alquiler en el acuerdo de coalición que ambos suscribieron a principios de enero. La iniciativa afectará, según una nota oficial, «especialmente» a los lanzamientos de esa índole que «se dan en zonas de mercado de alquiler tensionado y por grandes tenedores de vivienda que se dedican al mercado inmobiliario».

La paradoja es que el comunicado, en el que se destaca el trabajo realizado «mano a mano» por los dos vicepresidentes, se difundió exactamente el mismo día en el que el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) anunció la caída, por primera vez desde 2016, de los desahucios por impago de la renta al propietario de un inmueble. Según el informe sobre el efecto de la crisis en los órganos judiciales, en 2019 ese tipo de operaciones alcanzaron las 36.467, lo que supone un 2,2% menos que un año antes.

Tanto Iglesias como Calvo, entre los que según fuentes socialistas existen tensiones obvias, se esforzaron a lo largo del día, sin embargo, por dar relumbrón a la medida para lanzar el mensaje de que la crisis interna protagonizada por ambos ha quedado atrás. En un texto en sus redes sociales, el secretario general de Unidas Podemos, presumió incluso de la «eficiente coordinación» con los ministerios socialistas implicados y agradeció su actitud tanto a Calvo como a la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, al ministro de Transportes, José Luis Ábalos, y al propio Pedro Sánchez.

Calvo explicó, por su parte, que fue Iglesias quien le llamó el pasado jueves para hablar del real decreto que hoy tiene intención de aprobar el Consejo de Ministros con medidas de respuesta a las ejecuciones de desahucios. En concreto, lo que hará el Gobierno, además de la iniciativa pactada entre los socios, será ampliar hasta 2024 la moratoria de los desahucios que afectan a los colectivos más vulnerables, una medida aprobada en 2013 por el Ejecutivo de Mariano Rajoy y prorrogada también por los populares en 2017, año en el que además se acordó ampliar la protección a familias con hijos menores de edad o monoparentales con hijos a cargo, en situación dedesempleo, con discapacidad, dependencia o enfermedad grave o víctimas de violencia de género.

Este asunto es especialmente sensible para Podemos porque, en sus inicios como formación política que aspiraba a asaltar las instituciones, hizo bandera de ellas. El líder morado admitió ayer, no en vano, que la semana pasada mantuvo una reunión con la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH)en la que se encontró una actitud muy «crítica» con su desempeño en el Gobierno. Y aese episodio se une el 'escrache' de una docena de estudiantes con el que se topó el miércoles pasado cuando acudió a su antigua facultad y que le recibieron al grito de «vendeobreros».