Bolo: «Estamos espesos y atascados»

Bolo analizó esa jugada que acabó con el gol en contra, pero, sobre todo, la precipitación con la que los suyos buscaron sin éxito la igualada. «Nos hicieron una buena contra tras un error nuestro porque quisimos dividir cuando no tocaba y a partir de ahí, han entrado muy fácil por ese perfil. Por contra, nosotros no estamos encontrando el camino del gol. Seguiremos trabajando para lograrlo, pero hasta el momento esas ansias de querer meter gol nos están lastrando: estamos jugando muy precipitados y con muchos nervios», recalcó el propio entrenador azul.

Bolo echó de menos que su equipo jugase con más calma, y lamentó no haber tenido la profundidad deseada, sobre todo en un primer tiempo en el que el Oviedo «no encontró el camino». «No podemos jugar tantas veces para atrás, cuando ya superas una línea no puedes volver, porque el rival se vuelve a colocar. Hemos mejorado en la segunda, pero nos han faltado profundidad en general, no todos pueden ur a pedirla al pie», criticó en un alarde de sinceridad.

El cuerpo técnico volvió a ser prudente con los problemas físicos de sus jugadores, y explicó que Borja Sánches sintió una molestia en el aductor que motivó su cambio y con la que ahora solo cabe esperar para ver si tiene mayor trascendencia o no. La elección de Jimmy para el once, principal novedad al ocupar el puesto de Koba en Burgos, se debió a la búsqueda de equilibrio en un centro del campo en el que Bolo no quería que el Ibiza transitase. «El problema es que lo consiguieron, no encontramos lo que buscábamos. Llevamos tiempo trabajando juntos y todos sabemos lo que queremos, pero nos está costando», lamentó.

El oviedista insistió es solo hay una fórmula para resolver esta situación que atraviesa ael equipo y que esta pasa por «seguir trabajando y buscándolo». «No estamos dando con la tecla ni consiguiendo lo que se nos pide, pero esto es fútbol y hay que apechugar con lo que tenemos ahora, seguir trabajando y buscar ese camino que ahora mismo no vemos. Hay que intentar encontrarlo lo antes posible», comentó en referencia a esa fórmula que piensa seguir aplicando de puertas para adentro en El Requexón.

La derrota supuso un mal sabor de boca para dos jugadores que disputaban sus primeros minutos como oviedistas ante el Ibiza: Miguelón y Pomares. Especialmente bueno fue el papel de este último, que llevó el protagonismo de los centros al área desde la izquierda. «Llevan tiempo fuera y necesitan más entrenamientos y minutos, pero buscábamos eso, que centraran. El partido requería profundidad por fuera, no la estábamos teniendo y Miguel y Pomares son profundos y sacan centros. Pomares lo ha logrado más de hecho», comentó.

Lo que respetó Bolo por encima de todo fue el derecho que tiene la afición a expresarse, por lo que no hubo ni un solo reproche por su parte tras la pitada final. «La afición tiene que expresarse, yo mientras nos anime a muerte durante el partido siempre les estaré agradecido. Con derrota y mal juego es normal que piten cuando acaba: no estamos cumpliendo las expectativas, es normal que se vayan tristes y muestren su descontento», concluyó.