Calleja, entrenador del Real Oviedo: «Iba a ser duro, pero fue un partido casi perfecto»

Javi Calleja, entrenador del Real Oviedo, era ayer la viva imagen de la felicidad en la sala de prensa del Carlos Tartiere. Su equipo acaba de conseguir la cuarta victoria consecutiva como local y las sensaciones que transmite son cada vez mejores. «Estoy contentísimo». Así arrancó su intervención, para dar paso al análisis de lo que él vio sobre el césped. «Fue un partido muy completo, el resultado dice mucho de lo que fue el encuentro ante un rival que viene haciendo las cosas muy bien, que partía en ascenso directo, que apenas había encajado», afirmó. «Y sabíamos que iba a ser duro, de picar piedra, de tener paciencia y de creer en lo que estamos haciendo. Y se ha dado un partido casi perfecto», explicó.

El matiz del casi tenía una explicación clara y sencilla para el madrileño, que se refirió a David Costas y Jaime Seoane, que tuvieron que dejar el partido con problemas físicos. «Lo peor han sido las lesiones. Hay que hacer pruebas, pero creo que ambas irán para largo. La de Costas y la de Seoane. Por las sensaciones y lo que dicen ellos… Igual no es tanto, pero contamos con que sean a medio plazo».

Con el triunfo, el equipo azul asalta las primeras plazas de la clasificación y eso es algo que la afición estaba demandando desde el final del curso anterior. Calleja no mira tanto a la tabla: «Le doy valor a la dinámica más que a la clasificación. Me quedo con el trabajo que da frutos y que el equipo juega caca vez mejor y no se conforma. Queremos estar arriba al final y para eso hay que ganar muchos partidos y seguir la línea que llevamos».

Hace dos meses, las criticas arreciaban sobre su trabajo y los resultados. Ahora, los aplausos hacen más ruido que el resto. «Me dedico a trabajar y a creer en lo que hacemos. Cuando ganas sueles tener halagos y no les hago y a las críticas, tampoco para que no me influyan. Sólo miro adelante. Hay que creer en lo que uno hace».

Ahora que el calendario acumula partidos, también llegan las bajas, pero Calleja sigue fiel a la confianza que tiene en sus jugadores. «Hay una plantilla muy compensada, con buenos jugadores que lo demuestran día a día el trabajo que hacen. Hay muchos partidos y habrá minutos para todos», aseguró. Al margen de la calidad, el técnico valora lo humano: «Lo más orgulloso es ver a un equipo entregado, que se alegra por el equipo, por los compañeros, no son egoístas y están felices. Sibo es el claro ejemplo que siempre está para sumar y así llegar a las metas».

Calleja también elogió la actuación arbitral. «Me quito el sombrero con el árbitro, él en directo ve una jugada que para mí es una jugada normal de fútbol, ha tenido personalidad».

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