La ciudad deportiva, el estadio y la cantera, las prioridades de Pachuca

El Grupo Pachuca quiso acercar ayer a los aficionados sus avances y proyectos para el Real Oviedo a través de un desayuno de trabajo con los medios de comunicación locales. En un acto en el que participaron Jesús Martínez, Martín Peláez y Agustín Lleida, se informó sobre la búsqueda de terrenos para la construcción de una nueva ciudad deportiva, el inicio de las obras en el estadio Carlos Tartiere para que su uso sea diario, la intención de potenciar la cantera y, a más largo plazo, la puesta en marcha de otras iniciativas, como la universidad del deporte.

También habló Jesús Martínez de la reunión que mantuvo el pasado jueves con el cuerpo técnico, de la que asegura sacó conclusiones muy deportivas. El mandatario comentó lo mucho que le gustó el equipo ante Las Palmas y las ideas tan claras que el técnico le transmitió.

Evidentemente, el motor de todo es para los responsables de la entidad el aspecto deportivo y una buena marcha del equipo influiría positivamente en todo ello. Por eso, también se habló de reforzar la plantilla y tratar de que el equipo enganche a la afición.

En cuanto a la ciudad deportiva, el emplazamiento que más gusta es el aledaño a El Requexón, aunque con el río Nora por medio. Eso implicaría la construcción de una pasarela para unir ambos terrenos. Uno de los problemas que hay en esos terrenos es que están sujetos a restricciones por ser patrimonio industrial alguno de los edificios. La nueva ciudad deportiva se considera clave para el crecimiento de la cantera, uno de los pilares en la filosofía del Grupo.

En cuanto a las obras en el Carlos Tartiere, es inminente la instalación de unos nuevos vídeomarcadores, publicidad dinámica y una nueva megafonía. Todo esto sería sufragado con dinero procedente de los Fondos CVC, aunque para la ciudad deportiva haría falta aportaciones extra de capital que acometería el Grupo Pachuca.

En el Carlos Tartiere, para eso se reunieron los responsables con Alfredo Canteli, se pretende aprovechar parte de los bajos del estadio y otras instalaciones para actividades comerciales y de hostelería y eventos. Otro de los asuntos que se trataron con el Ayuntamiento es la mejora de los accesos al estadio. En la junta de accionistas fue una de las reinvindicaciones recurrentes de los aficionados. Se están estudiando soluciones y una de ellas podría ser la instalación de unas escaleras mecánicas. Los dirigentes azules tienen previsto ver mañana en Eibar unas que hay en la ciudad armera.

Eso también se espera que pueda influir en la mejora de la asistencia al estadio, ya que, de los más de 19.000 abonados de la entidad, no acuden a los partidos más de 13.000. Por eso también se busca incentivar la cesión de los abonos entre aficionados en el futuro.

A más largo plazo se trabaja en la creación de una universidad del deporte, similar a las que el grupo tiene en Pachuca.

Todo ello va encaminado a buscar una rentabilidad económica en un futuro que dote de más estabilidad al club y le permita seguir creciendo.