El Real Oviedo revive una pesadilla en Alcorcón

El Alcorcón sacó los colores al Real Oviedo ayer con una goleada que dinamitó los cimientos defensivos azules. El conjunto madrileño, que solo había anotado siete tantos en las primeras quince jornadas, logró cinco dianas y volvió a convertir a los de Hierro en ese equipo frágil que fue zarandeado por el Huesca para hacer revivir a los aficionados carbayones una amarga sensación que no experimentaban desde la jornada que cerró el pasado campeonato liguero ante Osasuna.

El conjunto navarro hurgó en la herida de los oviedistas con un 0-5 en un Carlos Tartiere crispado por el desplome clasificatorio de los suyos, que habían sepultado una semana antes sus opciones de disputar el 'play off' de ascenso con una derrota en La Romareda. Esa amarga despedida de campaña fue el último partido en el banquillo azul de Generelo, que inició su etapa al frente del equipo en Alcorcón, donde el conjunto carbayón volvió a recibir ayer cinco goles por una retahíla de errores que facilitaron el abultado triunfo (5-1) del cuadro madrileño.